Un estudio reciente sugiere que los escorpiones de mar gigantes, criaturas marinas que dominaron los océanos hace más de 400 millones de años, eran también migrantes capaces de recorrer largas distancias.
Un nuevo estudio revela información fascinante sobre los escorpiones de mar gigantes, criaturas que dominaron los océanos hace más de 400 millones de años.
Los eurypteridos, como se les conoce científicamente, eran depredadores de gran tamaño, algunos alcanzando longitudes de hasta 2,5 metros.
Sus impresionantes pinzas y exoesqueletos gruesos les proporcionaban un rango como depredadores en su ambiente marino, pero ahora, nuevas investigaciones sugieren que estos organismos también eran viajeros incansables.
Investigadores, liderados por Russell Bicknell del Museo Americano de Historia Natural, publicaron sus hallazgos en la revista Gondwana Research.
Este estudio no solo amplía nuestra comprensión sobre la diversidad de estas criaturas, sino que también proporciona pistas sobre las razones de su eventual extinción.
Los fósiles de los eurypteridos se han encontrado principalmente en América del Norte y Europa, y recientemente se han documentado en China.
Sin embargo, los hallazgos en Australia son particularmente interesantes.
Bicknell y su equipo han analizado dos nuevas colecciones de fósiles en Australia que, a pesar de estar fragmentadas, representan especies como el Pterygotus y el Jaekelopterus, conocidos como los 'realmente grandes'. El Pterygotus puede medir hasta 1,7 metros, mientras que el Jaekelopterus se extiende hasta 2,5 metros, lo cual los posiciona como algunos de los depredadores más imponentes de su época.
Este descubrimiento es significativo porque marca la primera evidencia de que los escorpiones de mar gigantes existieron en el supercontinente Gondwana.
Según Bicknell, estos escorpiones marinos probablemente realizaron migraciones sustanciales de miles de kilómetros hasta llegar a Australia, donde sus restos han sido encontrados junto a grandes peces y trilobites, indicando un ambiente propicio para su sustento.
"Estos animales estaban realmente bien adaptados para viajar grandes distancias, posiblemente desplazándose por distancias comparables a las que recorren algunas ballenas modernas", explicó Bicknell.
Sin embargo, aún se investiga si estas migraciones eran temporales o estacionales.
Las evidencias sugieren que se movían a través de ecosistemas marinos que podrían haber sido similares a grandes deltas.
A pesar de la magnificencia de los escorpiones de mar, la razón concreta de su extinción sigue siendo un misterio.
Aunque este estudio no proporciona respuestas definitivas, abre nuevas vías de investigación sobre el fenómeno del gigantismo en la evolución, donde las criaturas aumentan de tamaño hasta un punto crítico antes de su desaparición.
"Podría ser debido a factores ambientales o ecológicos, como la competencia con otras especies.
También es posible que simplemente hayan sobrepasado sus límites evolutivos, lo que podría llevar a su extinción", afirmó Bicknell.
James Lamsdell, paleobiologo en la Universidad de Virginia Occidental, no involucrado en la investigación, considera que los fósiles analizados en Australia exhiben un estado mejor conservado que los anteriores, lo que refuerza la idea de que los escorpiones de mar gigantes habitaron en las costas de Gondwana.
Lamsdell anticipa que con más descubrimientos, se podrá entender mejor la historia de estas fascinantes criaturas y el porqué de su súbita desaparición del planeta.