Jane Goodall, reconocida conservacionista de 89 años, encuentra esperanza en los jóvenes para enfrentar los desafíos del cambio climático y la pérdida de biodiversidad.

La chispa que Goodall tuvo de joven se ha convertido en una carrera de toda una vida dedicada a la conservación.

Ahora, Goodall ve esa misma chispa en los jóvenes de hoy en día, y eso es lo que mantiene viva su esperanza a pesar de todo lo que está sucediendo en el mundo.

Goodall comenzó el programa juvenil Roots and Shoots en 1991, y ha crecido rápidamente, llegando a más de 70 países y contando con más de 12,000 jóvenes activamente involucrados en proyectos medioambientales en Canadá. Este programa busca trabajar con los jóvenes para frenar el cambio climático y la pérdida de biodiversidad, ya que ambas problemáticas están intrínsecamente relacionadas.

Goodall viaja aproximadamente 300 días al año para hablar sobre la importancia de la conservación y para inspirar a las personas.

Recientemente estuvo en Toronto dando una conferencia en el Meridian Hall.

Durante su visita, Goodall compartió su preocupación por la pérdida de biodiversidad y la importancia de actuar antes de que sea demasiado tarde.

Goodall explicó que cada especie juega un papel fundamental en el ecosistema, y que cuando una especie desaparece, es como si se arrancara un hilo de un hermoso tapiz vivo.

Si suficientes hilos son arrancados, el tapiz se desmorona y el ecosistema colapsa.

Por lo tanto, es vital que tomemos acción ahora para evitar esta catástrofe.

Cuando Goodall habla con los jóvenes, puede sentir su optimismo, pero también su enojo hacia las generaciones anteriores que les han dejado este enorme problema.

Goodall comprende este enojo y lo utiliza como motivación para impulsar a los jóvenes a tomar medidas concretas.

En Roots and Shoots, los jóvenes eligen tres proyectos: uno para ayudar a las personas, uno para ayudar a los animales y otro para ayudar al medio ambiente.

Goodall destaca que estos aspectos están estrechamente relacionados.

Los jóvenes se sienten esperanzados y asisten a las conferencias de Goodall en todo el mundo, abarrotando los eventos en solo días u horas.

La esperanza es una de las principales razones por las que acuden a las charlas, y Goodall considera que es fundamental mantener esta esperanza viva.

A pesar de las dificultades que enfrentamos en el mundo actualmente, Jane Goodall encuentra esperanza en los jóvenes y continúa luchando por un futuro mejor.

Su mensaje inspirador y su dedicación incansable son un verdadero ejemplo para todos nosotros.