El antiguo edificio de la Fonería de Cañones de la Rambla en Barcelona se rehabilitará para convertirse en un nuevo centro de cultura digital. Las obras están programadas para comenzar en enero de 2024 y se espera que el centro abra al público en 2027, con un presupuesto de 13 millones de euros.

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En Cataluña, tras más de 20 años sin uso desde que la Generalitat lo adquirió, el antiguo edificio de la Fonería de Cañones de la Rambla se someterá a rehabilitación para dar paso a un innovador centro de cultura digital.

Las obras darán inicio en enero de 2024. El edificio se encuentra en el frente marítimo de la Rambla de Barcelona y se tiene previsto que el nuevo centro sea inaugurado en 2027. Además, contará con un espacio para exposiciones abierto a los vecinos del barrio.

Este inmueble está catalogado como Bien Cultural de Interés Local (BCIL) según el Catálogo de Patrimonio Arquitectónico del Ajuntament de Barcelona.

La Cultura Digital se refiere a todos aquellos contenidos creativos y artísticos en los que la tecnología juega un papel fundamental.

Este nuevo ámbito de creación cultural está en auge.

El centro de la Fonería será un espacio avanzado y físico dedicado a la creación, producción, investigación y exhibición.

Además, servirá como punto de entrada al centro de la ciudad en Catalunya Media City, el prominente hub audiovisual y digital de las Tres Chimeneas.

Tendrá la función de ser un banco de pruebas para proyectos que más adelante formarán parte del amplio equipamiento del Besòs, al mismo tiempo que ofrecerá los contenidos del Catalunya Media City a los ciudadanos aprovechando la ubicación central en la Rambla.


Con un presupuesto de 13 millones de euros, la rehabilitación se llevará a cabo en dos fases: la reforma de la fachada comenzará en enero de 2024 y se extenderá durante todo el próximo año, mientras que la reforma interior está prevista para iniciar en 2025 y la apertura del centro al público será en 2027.

El edificio de la Fonería de Cañones, también conocido como Antigua Fonería Real de Cañones o Antiguo Banco de Barcelona, fue construido a finales del siglo XVII y renovado en estilo neoclásico en 1858 por el arquitecto Josep Oriol Mestres.

En 1537, el Emperador Carlos ordenó la creación de una fundición real de cañones en la Rambla.

Después de la derrota de 1714, Felipe V prohibió la fabricación local de artillería y la Fonería comenzó a producir campanas, entre otros objetos.

En 1844, el banquero y político Manuel Girona la convirtió en la sede del Banco de Barcelona.

Tras la quiebra del banco en 1920, el edificio cerró hasta que se utilizó como sede de la Comandancia General del Cuerpo de Sometents en 1934. Después de la Guerra Civil, el edificio pasó a depender del Gobierno Militar, que estableció una farmacia militar y oficinas allí. En 2003, el Ministerio de Defensa, propietario del edificio hasta entonces, lo vendió a la Generalitat de Catalunya.