El sistema de pago del subte en Buenos Aires se moderniza con la incorporación del código QR, ofreciendo a los pasajeros una opción rápida y sin conexión a internet. Además, continúa la renovación de la flota y las estaciones para mejorar el servicio.

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La ciudad de Buenos Aires ha dado un paso importante hacia la modernización de su sistema de transporte público al habilitar la opción de pagar el subte mediante códigos QR, una innovación que busca facilitar la experiencia de los usuarios y reducir los tiempos de espera en los molinetes.

Este nuevo método se suma a las alternativas ya existentes, como las tarjetas SUBE, las tarjetas de débito y crédito, además del pago con teléfonos móviles a través de aplicaciones, que se implementó en diciembre pasado.

Con esta incorporación, más de 800.000 pasajeros que utilizan diariamente el subte podrán beneficiarse de una opción de pago aún más ágil y sencilla. La particularidad del sistema con QR es que no requiere conexión a Internet en el momento del pago, lo que lo hace especialmente útil en zonas con baja señal o en situaciones donde la conectividad puede ser intermitente.

En total, hay 275 molinetes multipago habilitados en todas las estaciones del sistema.

El Jefe de Gobierno de la Ciudad, Jorge Macri, destacó que "la Ciudad fue pionera en implementar un sistema multipago y en terminar con el monopolio de la SUBE para facilitar la movilidad urbana".

Además, comparó la innovación con otros centros urbanos de referencia mundial como Nueva York, Londres, Roma o Río de Janeiro, donde los sistemas de pago digital son moneda corriente.

El funcionamiento del pago con QR es sencillo: el usuario debe abrir la billetera digital que tenga en su teléfono, generar un código QR en la aplicación, acercarlo al lector en el molinete y confirmar el método de pago, que puede ser desde fondos en cuentas bancarias o billeteras virtuales.

Este sistema es interoperable, lo que significa que en principio puede usarse con distintas aplicaciones registradas ante el Banco Central, como Mercado Pago o Modo, y en un futuro, con todas las billeteras digitales que desarrollen tecnología compatible.

El precio del pasaje sigue siendo de 919 pesos argentinos en la tarjeta SUBE, equivalente a aproximadamente 4,70 euros, y se mantiene la tarifa plena.

Sin embargo, los usuarios que utilicen las billeteras virtuales podrán acceder a beneficios como descuentos progresivos por volumen de viajes: un 20% después de 20 viajes, un 30% tras 30 viajes, y un 40% en más de 40 viajes, siempre que utilicen la misma cuenta.

Además, las billeteras virtuales suelen ofrecer promociones adicionales.

Es importante recordar que la tarjeta SUBE continúa vigente y permite acceder a tarifas especiales y descuentos, como los beneficios para jubilados, personas con discapacidad, trasplantados y tarifas sociales, maestros y estudiantes.

La tarifa social, por ejemplo, se aplica en casos específicos y requiere la validación correspondiente.

El sistema de pago con QR no tiene requisitos tecnológicos especiales en los teléfonos, ya que funciona tanto en dispositivos Android como en iOS. Cada vez que un usuario realiza un pago, se genera un código QR distinto, que debe ser escaneado en el molinete; el código se puede regenerar cada 8 segundos para mayor seguridad.

El sistema también contempla límites en la cantidad de viajes con saldo negativo, permitiendo hasta dos viajes en esa condición. Además, hay restricciones para evitar abusos: en un período de 15 minutos, se pueden realizar hasta 5 viajes, y un máximo de 10 viajes por día con el mismo usuario.

En caso de errores en el cobro, los usuarios deben contactar a los canales oficiales de la billetera digital utilizada para gestionar la solución del problema.

La implementación de esta tecnología forma parte de un plan de renovación integral del sistema de transporte, que incluye la compra de 214 nuevos vagones para las líneas A, B y C, con una inversión cercana a 370 millones de euros, la más grande en la última década.

Asimismo, en el marco del plan, se han restaurado y mejorado varias estaciones, incluyendo la puesta en valor de 11 estaciones de subte y 13 del Premetro, y se continúan ejecutando trabajos en estaciones clave como Plaza Italia, Tribunales, Uruguay, Carlos Gardel, Malabia, Agüero, Loria, Río de Janeiro, Piedras y Congreso, en distintas líneas.

Las obras en el Premetro también avanzan en estaciones como Larrazábal, Nicolás Descalzi y Gabino Ezeiza.

Con estas acciones, Buenos Aires busca no solo modernizar su infraestructura, sino también ofrecer a sus ciudadanos una experiencia de viaje más cómoda, segura y eficiente, adaptada a las nuevas tecnologías y necesidades del siglo XXI.