Investigadores de inteligencia artificial en Canadá advierten sobre el inminente desarrollo de superinteligencia y sus implicaciones para la humanidad.
Un grupo de destacados investigadores de inteligencia artificial en Canadá ha compartido sus inquietudes y predicciones sobre el desarrollo de la superinteligencia, que podrían cambiar drásticamente la vida humana.
Se estima que en los próximos cinco años podríamos alcanzar esta nueva frontera tecnológica, lo que plantea tanto oportunidades como riesgos.
La inteligencia artificial ha evolucionado a pasos agigantados. Desde comandos de voz en nuestros dispositivos hasta el reconocimiento facial en aplicaciones de pago, la inteligencia artificial actual se limita principalmente a tareas específicas, conocida como inteligencia artificial estrecha (ANI).
Sin embargo, los expertos sugieren que estamos al borde de un salto hacia la inteligencia artificial general (AGI), que tendría la capacidad de pensar de manera autónoma y resolver problemas de manera más efectiva que los humanos.
Eventualmente, la superinteligencia (ASI) podría superar nuestra inteligencia y podría estar a solo unos años de distancia.
Geoffrey Hinton, un destacado científico informático y considerado uno de los 'padres' de la inteligencia artificial, ha expresado su preocupación sobre este avance.
Según Hinton, la probabilidad de que desarrollemos una inteligencia que supere la nuestra está aumentando, y podría ocurrir en un periodo de cinco a veinte años.
"Pensaba que era un desafío que llevaría de 50 a 100 años, pero ahora creo que estamos mucho más cerca de lo que pensaba", asegura.
Por su parte, Jeff Clune, profesor de informática en la Universidad de Columbia Británica, también respalda estas afirmaciones. Advierte sobre la posibilidad de que la superinteligencia surja antes de lo esperado, dando lugar a cambios transformadores en áreas vitales como la salud pública y la sostenibilidad.
Sin embargo, ambos investigadores destacan la necesidad urgente de establecer regulaciones adecuadas para manejar esta nueva fase de desarrollo tecnológico.
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El Ayuntamiento de Zaragoza ha acogido hoy el primer foro de debate sobre inteligencia artificial e información organizado por Periodismo 2030. Descubre las conclusiones de la encuesta nacional sobre medios de comunicación en relación a la IA.La esencia de la preocupación radica en el control. Si bien la superinteligencia podría proporcionar soluciones innovadoras a problemas como el hambre mundial y las crisis ambientales, los riesgos asociados son igualmente alarmantes.
Hinton estima que existe una posibilidad del 10 al 20 por ciento de que la inteligencia artificial pueda llevar a la humanidad a la extinción en las próximas tres décadas si no se gestiona correctamente.
"Nunca hemos tenido que lidiar con algo más inteligente que nosotros", dice Hinton, y plantea una analogía entre nuestra relación con los niños y el desarrollo de superinteligencias.
Al igual que un padre puede permitir que su hijo intente atarse los zapatos, llegado un momento puede decidir hacer la tarea él mismo, algo similar podría suceder con los humanos y las superinteligencias.
Esto plantea preguntas inquietantes sobre nuestro futuro.
Mientras tanto, los expertos instan a los gobiernos a regular el desarrollo de inteligencia artificial para garantizar que se realice de manera segura y ética.
A la vez que celebran el potencial transformador de esta tecnología, también reconocen los peligros inherentes a permitir que entidades de mayor inteligencia funcionen sin restricciones.
A medida que se intensifica la investigación y el desarrollo en este campo, el futuro de la superinteligencia está sobre la mesa, y la comunidad internacional debe actuar con responsabilidad para asegurarse de que este avance tecnológico no lleve a nuestra perdición.
La conversación sobre la inteligencia artificial no solo suscita expectativas y esperanzas; también requiere una reflexión profunda sobre cómo queremos que se integre en nuestra sociedad.
En última instancia, la forma en que manejemos el desarrollo de la inteligencia artificial definirá el legado que dejaremos a las generaciones futuras.
