El presidente de Coinbase, Brian Armstrong, implementa una política estricta para que los ingenieros utilicen herramientas de inteligencia artificial, y toma decisiones radicales ante la falta de cumplimiento.
A pesar de que #Coinbase había adquirido licencias empresariales para plataformas como GitHub Copilot y Cursor, algunos empleados no habían comenzado a usar dichas herramientas, lo que llevó a Armstrong a actuar de manera contundente.
Según informes, durante una entrevista en el podcast Cheeky Pint, en compañía del cofundador y presidente de Stripe, John Collison, Armstrong declaró que decidió “tomar un camino propio” y actuar de forma directa.
Supuestamente, publicó un mensaje en el canal de Slack para todos los ingenieros, donde estableció que sería obligatorio incorporar las herramientas de IA en su trabajo antes de que terminara la semana.
“La IA es importante. Necesitamos que todos aprendan a usarla y al menos se integren”, afirmó Armstrong. Asimismo, explicó que, aunque no era obligatorio usar estas herramientas a diario de inmediato, el objetivo era que todos hicieran el proceso de onboarding en un plazo de siete días.
Además, advirtió que si alguien no cumplía, sería convocado a una reunión el sábado para entender las razones.
En esa reunión, algunos empleados alegaron motivos válidos, como estar de vacaciones o en un viaje, pero presuntamente otros no presentaron excusas y, en consecuencia, fueron despedidos.
Esta acción radical ha sido vista por algunos analistas como un intento de Coinbase de mantenerse a la vanguardia en innovación tecnológica
Esta acción radical ha sido vista por algunos analistas como un intento de Coinbase de mantenerse a la vanguardia en innovación tecnológica, en un sector donde la competencia por la adopción de IA es cada vez más intensa.
La historia de Coinbase en el entorno de las #criptomonedas es bastante reciente, ya que la plataforma fue fundada en 2012 en San Francisco por Brian Armstrong y Fred Ehrsam.
Desde entonces, se ha convertido en uno de los exchanges más grandes y populares del mundo, valorada en miles de millones de dólares. Sin embargo, la empresa ha enfrentado numerosos desafíos regulatorios y de mercado, y esta política de integración rápida de IA refleja una estrategia para optimizar sus operaciones y mantenerse competitiva.
Por otro lado, esta medida también ha generado críticas, ya que algunos consideran que la presión para adoptar nuevas tecnologías sin un período de adaptación adecuado puede afectar la moral y el ambiente laboral.
A pesar de ello, Armstrong y su equipo parecen convencidos de que la innovación rápida es clave en la industria de las criptomonedas, donde las tendencias tecnológicas cambian con rapidez.
En resumen, la decisión de Coinbase de despedir a ingenieros que no se adaptaron a la incorporación de IA en sus procesos laborales demuestra la creciente importancia que esta #tecnología está adquiriendo en el sector financiero digital.
