Emergencia en Calgary por movimiento de alces: dos ejemplares son reubicados tras incidentes con perros
Dos jóvenes alces han sido trasladados fuera de la comunidad de Arbour Lake en Calgary tras un encuentro con un perro que resultó en lesiones leves para el animal doméstico. La presencia de alces en áreas urbanas de Calgary se ha incrementado, generando preocupación entre expertos y residentes.
En la ciudad de Calgary, Canadá, la presencia de #alces en zonas urbanas cada vez es más frecuente, alcanzando incluso áreas residenciales y parques.
Recientemente, dos jóvenes ejemplares de esta especie fueron trasladados fuera de la comunidad de Arbour Lake, ubicada en el noroeste de Calgary, como medida para prevenir futuros incidentes que puedan poner en riesgo a las personas y los animales domésticos.
Este suceso ocurrió tras un altercado en la noche del lunes, cuando un niño dejó a su perro en el patio trasero de su vivienda, sin prever que dos alces jóvenes estaban en las inmediaciones.
Según las autoridades, uno de los alces, un macho y una hembra de aproximadamente 1,5 años de edad, se encontraron con el perro, y en un intento de defenderse, el animal grande propinó una patada, causando heridas leves al perro.
La provincia de Alberta, donde se encuentra Calgary, tiene una larga historia de interacción entre seres humanos y vida silvestre. Los alces, particularmente en temporadas específicas, se acercan a zonas urbanizadas en busca de alimento y agua, especialmente en años con condiciones meteorológicas adversas o escasez de recursos en su hábitat natural.
Los expertos advierten que estas visitas no solo representan riesgo para la fauna, sino también para los residentes y sus mascotas.
Desde principios de 2024, se han reportado varias ocasiones similares en diferentes barrios de Calgary. En enero pasado, otras dos madres con crías fueron removidas por la misma razón, tras haber sido consideradas agresivas cuando se acercaron demasiado a personas.
En esa oportunidad, las autoridades utilizaron técnicas especializadas y realizaron la captura y #reubicación en zonas más alejadas de la urbe, como los corredores de #vida silvestre en la zona conocida como Harold Creek, ubicada al norte de la ciudad.
El aumento en la presencia de alces en áreas urbanas se ha atribuido en parte a las acciones humanas
El aumento en la presencia de alces en áreas urbanas se ha atribuido en parte a las acciones humanas, como el crecimiento de desarrollos residenciales en áreas antes reservadas para la fauna.
Estudios realizados por instituciones como el Miistakis Institute y plataformas de ciencia ciudadana como iNaturalist indican que, desde 2020, se han detectado más de 300 avistamientos de alces en la región de Calgary.
Según datos de monitoreo, estos animales prefieren las zonas cercanas a áreas boscosas y humedales, como el Parque Provincial Fish Creek y Weaselhead Flats, pero en muchas ocasiones cruzan senderos en dirección a zonas residenciales en busca de alimento.
Los expertos recomiendan a los vecinos mantener distancia y no intentar interactuar con los alces, además de mantener a los perros con correa en estas áreas.
El comportamiento de los alces en zonas urbanas puede variar, pero en general tienden a ser animales prudentes y preferir evitar conflictos. Sin embargo, en situaciones donde se sienten acorralados o amenazados, pueden reaccionar con agresividad. Las autoridades y biólogos advierten que en caso de un encuentro cercano, lo mejor es alejarse y darles el espacio suficiente para evitar que la situación escale.
La presencia creciente de fauna en la ciudad también plantea desafíos en el manejo de la vida silvestre y la protección de las comunidades humanas.
Las medidas adoptadas en #Calgary incluyen la reubicación de animales problemáticos, campañas de concienciación y la vigilancia mediante cámaras de monitoreo que muestran que los alces interactúan con humanos en las horas de la tarde y la noche, principalmente entre las 6 y las 9 de la tarde.
Este fenómeno, si bien puede ser sorprendente para quienes no están acostumbrados a convivir con fauna silvestre en zonas urbanas, refleja un cambio en la dinámica entre especies humanas y animales en un contexto de expansión urbana y cambios ambientales globales.
La coexistencia pacífica requiere de conciencia y respeto, además de acciones preventivas para reducir incidentes y garantizar la seguridad de todos los involucrados.