Con actividades informativas, se busca cambiar la percepción social sobre el síndrome de Down y promover la inclusión.

El pasado 21 de marzo, los profesionales del Centro de Salud Isla de Oza, ubicado en el distrito de Moncloa, en Madrid, llevaron a cabo una serie de actividades con motivo del Día Mundial del Síndrome de Down.
Esta celebración tuvo como objetivo principal concienciar a la sociedad sobre la realidad de las personas con esta alteración genética, proporcionando información útil y herramientas de apoyo que ayuden a normalizar sus vidas.
Tales iniciativas son clave no solo para informar a los pacientes y usuarios del centro de salud, sino también para desafiar y desmontar los mitos y creencias erróneas que persisten en torno al síndrome de Down.
A lo largo de los años, diferentes estadios de avance en la atención y el tratamiento de personas con esta condición han permitido que la calidad de vida de estos individuos y sus familias mejore notablemente.
Un enfoque fundamental de esta celebración fue generar una nueva forma de ver y abordar a las personas con síndrome de Down, tanto por parte de la sociedad en general como de las instituciones.
Los profesionales del centro buscan promover la inclusión plena y el apoyo a las familias, así como garantizar que las personas con esta condición tengan acceso a oportunidades equitativas en todas las áreas de la vida.
Además, otra de las metas importantes de esta jornada fue crear conciencia sobre la importancia de ofrecer soporte legal que favorezca la conciliación familiar de los cuidadores, quienes desempeñan un papel crucial en el bienestar de estas personas.
En los últimos años, la esperanza de vida de quienes viven con síndrome de Down ha aumentado considerablemente, superando actualmente los 60 años.
A pesar de que existen diversas patologías asociadas a esta condición, como problemas cardiovasculares, endocrinos y musculoesqueléticos, el avance en el tratamiento y la atención específica proporcionada por equipos médicos y multidisciplinarios ha permitido optimizar la salud y mejorar significativamente la calidad de vida de estos individuos.
El trabajo constante de sensibilización y educación en este ámbito es esencial para erradicar estigmas y promover una sociedad más inclusiva, donde todas las personas, sin importar sus características, puedan disfrutar de una vida plena y digna.
Este tipo de actividades realizadas en el Centro de Salud Isla de Oza son un claro ejemplo de que, con el apoyo adecuado y la voluntad colectiva, es posible construir un entorno más justo y solidario para las personas con síndrome de Down.