El Gobierno Vasco destina fondos a los municipios de Euskadi para distribuir ayudas destinadas a quienes enfrentan dificultades económicas, ajustándose a nuevas normativas y necesidades sociales.

Estas ayudas, concedidas mediante los ayuntamientos, tienen como finalidad cubrir gastos básicos y prevenir situaciones de riesgo social.
Las AES son un instrumento clave en las políticas sociales de Euskadi, ya que permiten intervenir rápidamente en situaciones de pobreza y exclusión social.
Para acceder a estas ayudas, las personas deben cumplir ciertos requisitos, entre ellos ser mayores de 18 años, contar con al menos seis meses de empadronamiento en su municipio, no disponer de recursos suficientes para afrontar gastos esenciales, y no ser beneficiarias de otras prestaciones similares, como la Prestación Complementaria de Vivienda, la Prestación Económica de Vivienda, o las ayudas Gaztelagun.
Este año, la normativa que regula las AES ha sido actualizada para alinearse con la nueva legislatura de la Renta Garantizada de Ciudadanía (RGI), la ley de procedimiento administrativo y la normativa vigente sobre subvenciones.
El proceso ha sido resultado de un extenso trabajo colaborativo entre el Gobierno Vasco, cinco ayuntamientos de gran tamaño (Bilbao, Donostia, Vitoria-Gasteiz, Barakaldo y Errenteria) y personal técnico de EUDEL, la red de municipios vascos.
Uno de los aspectos innovadores del nuevo borrador del decreto es la incorporación de las nuevas configuraciones de unidades convivenciales, así como la determinación de un límite máximo en la cuantía de ayuda por vivienda en función del número de personas que la integran.
Esta medida busca adaptar las ayudas a la realidad de cada familia, promoviendo una distribución más equitativa.
Además, se ha establecido un nuevo sistema de reparto de la financiación, basado en indicadores de necesidad social. Dicho sistema tiene en cuenta el número de personas que perciben la RGI, junto con aquellas que no reciben ningún tipo de prestación social. También considera la cantidad de fondos que cada ayuntamiento ha recibido en años anteriores y el gasto justificado en el último ejercicio fiscal. La financiación se distribuirá en dos órdenes anuales: una al principio del año y otra tras la recepción y validación de los justificantes de gasto correspondientes a las AES del año previo.
Este método garantiza que los municipios con mayores necesidades y mayores niveles de vulnerabilidad puedan recibir fondos de manera inmediata y gestionar eficientemente las ayudas a partir del primer momento.
La voluntad del Departamento de Bienestar
La voluntad del Departamento de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico es que estas ayudas lleguen de forma eficaz y rápida a quienes más las necesitan.
Tras finalizar la elaboración del borrador, se inició un proceso de consulta pública y de participación ciudadana, incluyendo órganos especializados como el OISS, el Consejo Vasco de Servicios Sociales y el Consejo Vasco de Inclusión.
Además, se abrirá un período de un mes para que la ciudadanía, las entidades del tercer sector social, como Cáritas y Cruz Roja, y otros interesados puedan presentar alegaciones y sugerencias.
Por otra parte, desde el Departamento confirmaron que, en el día de hoy, los ayuntamientos de la Comunidad Autónoma Vasca han recibido ya los fondos asignados para las AES correspondientes al ejercicio 2025.
La inversión total en este año asciende aproximadamente a 177.000 euros, cifra que será distribuida proporcionalmente entre las distintas localidades en función de los criterios establecidos.
Con estas medidas, el Gobierno Vasco refuerza su compromiso de seguir adaptando las políticas sociales a las nuevas realidades y necesidades sociales, garantizando una red de protección efectiva para todas las personas que enfrentan dificultades económicas en Euskadi.