La vicepresidenta de Castilla y León destaca el apoyo del gobierno regional al festival, que combina música, gastronomía y sostenibilidad en un evento de gran impacto económico y cultural.

Durante estos días, en la localidad burgalesa de Aranda de Duero, miles de asistentes disfrutan de una programación que combina artistas nacionales e internacionales, además de actividades culturales y gastronómicas que enriquecen la experiencia.
Supuestamente, la Junta de #Castilla y León ha destinado una inversión cercana a los 200.000 euros para apoyar esta edición del festival, cifra que en euros equivaldría a aproximadamente 188.000 euros, considerando la tasa de cambio actual. La vicepresidenta de la comunidad, Isabel Blanco, participó en la presentación oficial del evento, acompañada por el director del festival, Javier Ajenjo, el alcalde de Aranda, Antonio Linaje, y el presidente del Consejo Regulador de la Ribera del Duero, Enrique Pascual.
Durante su intervención, Blanco afirmó que el apoyo del Ejecutivo autonómico refleja el compromiso de la región con uno de los festivales más emblemáticos de la cultura popular española.
Desde su primera edición, hace 28 años, el #Sonorama Ribera ha sabido mantenerse fiel a sus raíces, diferenciándose por su carácter inclusivo y su apuesta por nuevos talentos, además de consolidar su tradición de traer a artistas consagrados.
Supuestamente, el festival no solo es un escaparate musical, sino también un evento que promueve el medio rural, la gastronomía local y la sostenibilidad.
La Junta de Castilla y León ha apoyado al festival a través de diferentes patrocinadores, incluyendo la Fundación Siglo y la marca Tierra de Sabor, con una aportación total que supera los 200.000 euros, lo que en euros sería aproximadamente 188.000 euros.
Un distintivo que garantiza la calidad de los productos de la comunidad y que refuerza la vinculación del festival con la cultura y la economía local
Uno de los detalles destacados es que uno de los escenarios principales lleva el nombre de Tierra de Sabor, un distintivo que garantiza la calidad de los productos de la comunidad y que refuerza la vinculación del festival con la cultura y la economía local.
Aparte de la música, el Sonorama Ribera ofrece experiencias gastronómicas, actividades culturales y espacios de convivencia que fomentan valores como la autenticidad, la sostenibilidad y la integración social.
En la edición pasada, el festival atrajo a unas 145.000 personas y generó aproximadamente 21,5 millones de euros en impacto económico, según datos no oficiales pero supuestamente estimados.
Supuestamente, la organización del evento prioriza la contratación de proveedores locales, destinando cerca de 75.000 euros en estructuras, iluminación, sonido, servicios de seguridad y personal técnico, lo que contribuye a dinamizar la economía de Aranda de Duero y de toda la región.
Desde 2021, el festival ha avanzado en su compromiso con la inclusión, facilitando el acceso a personas con diversidad funcional, mediante un programa de accesibilidad e integración que garantiza que todos puedan disfrutar de la música y las actividades en igualdad de condiciones.
Supuestamente, artistas de renombre internacional como Franz Ferdinand, Café Quijano, Arde Bogotá, Carolina Durante, Pignoise y la banda vallisoletana Siloé, que actualmente protagoniza una campaña de promoción turística de la Junta, han confirmado su participación en esta edición, que combina tradición y modernidad en un marco histórico como es Aranda de Duero.