La Casa de los Morlanes rinde homenaje a Totoro con una muestra que une arte y sostenibilidad.

Más de treinta años han pasado desde que 'Mi vecino Totoro' dejó una huella imborrable en la infancia de millones. La obra de Hayao Miyazaki no solo capturó la esencia de la naturaleza y lo sobrenatural, sino que también estableció un vínculo emocional que perdura en la cultura popular.
Ahora, este querido personaje inspira la exposición 'Totoro: Homenaje al Guardián del Bosque', que se llevará a cabo en la sala de la Casa de los Morlanes hasta el 15 de junio.
La exposición reúne a 35 artistas que reinterpretan la figura de Totoro, utilizando materiales ecológicos como cartón nido de abeja y papel decorativo, reflejando un compromiso firme con la sostenibilidad.
Este enfoque no solo ofrece una experiencia visual y sensorial excepcional, sino que también hace accesible la muestra a un público diverso, incluidos aquellos que no están familiarizados con la animación japonesa.
Desde una perspectiva contemporánea, los artistas han logrado capturar la conexión entre la icónica película y el medio ambiente. A través de ilustraciones digitales impactantes, cada participante ofrece su visión personal del espíritu de Totoro, plasmada en soportes que refuerzan el mensaje ambiental de la exposición.
La muestra, comisariada por Jordi Pastor y Reinaldo Pereira, con diseño de Daniel Mayorga, celebra no solo el legado de Studio Ghibli, uno de los principales estudios de animación a nivel mundial, sino también el talento artístico actual.
Entre los artistas destacados se encuentra el ilustrador zaragozano Fernando Blanco, conocido por su trabajo en el ámbito del cómic internacional, habiendo colaborado con editoriales como DC Comics y Marvel en títulos como Catwoman y la Liga de la Justicia Oscura.
Junto a él, se suman artistas de renombre internacional como Claudio Stassi y Giulia Francesca Massaglia, así como nombres consolidados como Danide, Juan Bernardo Muñoz Serrano y muchos otros.
La exposición 'Totoro: Homenaje al Guardián del Bosque', patrocinada por Fonofox y Escuela Joso, se presenta como un tributo a la creatividad y a la capacidad del arte para impactar.
Según Reinaldo Pereira, uno de los comisarios, "Totoro no solo es un ícono del cine, sino un símbolo universal de la conexión con la naturaleza y la necesidad de protegerla".
Un poco de historia: Studio Ghibli, fundado en 1985, ha sido pionero en la animación japonesa y mundial. A lo largo de sus más de tres décadas de existencia, ha producido más de una veintena de películas, destacando títulos como 'El viaje de Chihiro', que hizo historia al ser la primera película no hablada en inglés en ganar un Oscar a la Mejor Película de Animación.
Aunque su éxito global es indiscutible, el verdadero objetivo de Ghibli ha sido explorar la complejidad de la condición humana a través de narrativas profundas y emocionantes que resuenan con una amplia audiencia.
La exposición en la Casa de los Morlanes no solo rinde homenaje a este legado, sino que también invita a reflexionar sobre la importancia de la conservación del medio ambiente a través del arte.
Como ha demostrado 'Mi vecino Totoro', la conexión con la naturaleza es fundamental y esta muestra es un paso más hacia la conciencia ambiental en la cultura contemporánea.