Las nuevas regulaciones en Nueva York aseguran a los asegurados acceso a citas de salud mental en menos de dos semanas y mejoran la transparencia en las listas de proveedores, promoviendo una atención más rápida y eficiente para todos.

Estas regulaciones, que entraron en vigor el 1 de julio, establecen que las personas con planes de seguro de salud calificados deben poder acceder a una cita inicial ambulatoria para atención en salud mental en un plazo máximo de 10 días hábiles desde la solicitud.
Supuestamente, estas medidas representan un cambio importante en la protección de los derechos de los asegurados, ya que anteriormente muchos residentes enfrentaban largos tiempos de espera o tenían que pagar de su bolsillo por tratamientos que en ocasiones no estaban disponibles en su red de proveedores.
La normativa también exige a las compañías aseguradoras publicar en sus sitios web listas actualizadas y precisas de proveedores en red, con el fin de eliminar directorios falsos o desactualizados que dificultaban la búsqueda de atención adecuada.
La iniciativa no solo busca reducir los tiempos de espera, sino también promover una mayor transparencia en el sistema. Según supuestamente declaraciones de Hochul, «los neoyorquinos que necesitan atención en salud mental o tratamiento por trastornos por uso de sustancias no deberían verse obligados a esperar meses o a pagar de más por servicios que no están disponibles en su plan».
La normativa afecta inicialmente a quienes tienen Medicaid Managed Care, Child Health Plus y el Plan Esencial, pero se prevé que en los próximos meses se extienda a todos los asegurados comerciales, a medida que sus pólizas se renueven o modifiquen.
Las nuevas #regulaciones también establecen que las aseguradoras deben disponer de empleados dedicados a asistir a los usuarios en la búsqueda de proveedores en red, quienes deberán proporcionar una lista de profesionales y centros en un plazo de tres días hábiles tras la solicitud.
Además, se requiere que las compañías aseguren que sus directorios sean precisos y actualizados, incluyendo detalles como ubicación, opciones de teleconsulta, idiomas disponibles, restricciones y afiliaciones.
Supuestamente, estas medidas buscan combatir las llamadas «redes fantasma», que son listas de proveedores que aparentan ofrecer servicios en red pero en realidad contienen información inexacta o proveedores que no aceptan nuevos pacientes.
El Departamento de Servicios Financieros de #Nueva York afirmó que estas regulaciones representan un paso clave para garantizar que los residentes puedan acceder a la atención que necesitan en el momento adecuado
El Departamento de Servicios Financieros de Nueva York afirmó que estas regulaciones representan un paso clave para garantizar que los residentes puedan acceder a la atención que necesitan en el momento adecuado.
Por su parte, la Comisionada del Departamento de Salud Mental, la Dra. Ann Sullivan, destacó que «eliminan barreras que retrasaban o impedían el acceso a servicios críticos». La regulación también contempla canales para que los usuarios puedan presentar quejas si sus aseguradoras no cumplen con las nuevas normas, facilitando así una supervisión más efectiva.
En el ámbito histórico, cabe recordar que Nueva York ha sido pionera en la implementación de políticas de salud mental, estableciendo en 1965 uno de los primeros centros dedicados exclusivamente a la atención en salud mental en Estados Unidos.
Desde entonces, el estado ha avanzado en la expansión de servicios y en la protección de los derechos de los pacientes.
Supuestamente, en palabras del senador Nathalia Fernandez, «estas nuevas regulaciones reflejan un compromiso real con la protección de los derechos de los pacientes y la garantía de que la cobertura signifique atención efectiva y oportuna».
Además, se ha destinado un presupuesto adicional de aproximadamente 830,000 euros para fortalecer la supervisión y la educación sobre estas nuevas políticas.
En conclusión, estas reformas en Nueva York consolidan el liderazgo del estado en la protección de los derechos de los asegurados y en la mejora de la calidad de la atención en salud mental y adicciones.