Un terremoto de magnitud 7.1 sacudió la región del Tíbet, causando daños significativos y múltiples heridos.
Un poderoso terremoto tuvo lugar en el Tíbet, en el oeste de China, el pasado martes, provocando la muerte de al menos 95 personas y dejando a muchas otras atrapadas bajo los escombros.
Este fenómeno sísmico, que generó un total de aproximadamente 50 réplicas en pocas horas, mostró la intensa actividad geológica de la región, especialmente cercana a la frontera con Nepal.
Según el Centro Nacional de Terremotos de China, el terremoto fue registrado con una magnitud de 7.1, aunque otras fuentes locales indicaron una magnitud de 6.8.
Las primeras informaciones de la agencia estatal de noticias CCTV indicaron que más de 130 personas resultaron heridas debido a los temblores, que se sintieron en áreas tan distantes como Katmandú, la capital de Nepal.
Equipos de rescate han sido enviados a la zona afectada, donde numerosas casas han sido destruidas o dañadas.
Se estima que alrededor de 1,000 viviendas han sufrido daños severos, y los rescatistas trabajan sin descanso para encontrar a las víctimas atrapadas.
El epicentro del terremoto se localizó aproximadamente a 75 kilómetros al noreste de la icónica montaña del Everest, que se encuentra en la frontera entre China y Nepal.
Esta región es conocida por su actividad sísmica debido a la colisión de las placas tectónicas de India y Eurasia, un fenómeno que ha dado forma a algunos de los picos más altos del mundo.
Históricamente, esta área ha sido el epicentro de varios desastres naturales, incluido el devastador terremoto en Nepal en 2015 que dejó miles de muertos.
A medida que las secuencias de réplicas continuaron, las autoridades decidieron cerrar temporalmente la zona turística del Monte Everest, temiendo más deslizamientos de tierra y lesiones.
Aproximadamente 1,500 trabajadores de emergencia han sido desplegados y junto a ellos, se envió un número considerable de soldados para apoyar las labores de búsqueda y rescate.
El presidente chino, Xi Jinping, ha instado a todos los involucrados a maximizar los esfuerzos para salvar vidas, reducir el número de víctimas y ayudar a aquellos que han perdido sus hogares.
Esta situación también ha generado alertas en Nepal, donde el gobierno ha instruido a las autoridades locales a estar vigilantes y hacer un seguimiento de cualquier daño o heridos en la región montañosa próxima al epicentro.
Los temblores también han reactivado recuerdos de tragedias pasadas en la región.
A lo largo del último siglo, se han registrado 10 terremotos significativos en esta área, lo que subraya la necesidad constante de tener preparados planes de emergencia y un enfoque adecuado para mitigar los riesgos asociados a estos eventos naturales.
La comunidad internacional observa con preocupación la situación en el Tíbet y Nepal, esperando que las operaciones de rescate puedan llevar alivio a los afectados lo antes posible.