Científicos celebran el exitoso vuelo de prueba de la tecnología necesaria para generar energía desde el espacio

Imagen relacionada de un pequeno paso hacia la energia solar desde el espacio es un exito

Un grupo de científicos del Instituto de Tecnología de California está celebrando tras un exitoso vuelo de prueba de la tecnología necesaria para generar energía desde el espacio.

La misión, llamada Demostrador de Energía Solar del Espacio (SSPD-1, por sus siglas en inglés), fue una prueba a pequeña escala de las tecnologías requeridas para futuras estaciones de energía gigantes en el espacio.

Luego de su lanzamiento en enero pasado, el SSPD-1 pasó el último año evaluando distintas células solares y métodos de despliegue, y en marzo se convirtió en la primera tecnología en transmitir inalámbricamente energía a la Tierra desde el espacio.

Si bien la misión fue en general un éxito, surgieron algunos problemas que deben ser resueltos antes de que la energía solar a gran escala se convierta en una realidad.

Capturar energía desde el espacio y transmitirla a la Tierra es un concepto que se remonta a 1923, cuando el teórico ruso Konstantin Tsiolkovsky propuso espejos en el espacio que dirigirían poderosos rayos de luz solar hacia la Tierra.

En 1941, el escritor de ciencia ficción Isaac Asimov escribió un cuento llamado 'Razón' acerca de transmitir microondas desde el espacio que podrían ser capturadas por una estación terrestre y convertidas en electricidad.

Una de las grandes ventajas de colocar estaciones de energía en órbita es que la luz solar es hasta diez veces más intensa en el espacio porque no atraviesa la atmósfera terrestre.

Si una nave espacial se coloca en la órbita adecuada, puede estar expuesta continuamente a la energía del sol.

Si tiene éxito, el resultado podría ser una energía abundante, confiable y libre de carbono, capaz de abastecer de energía a un millón de hogares con un solo satélite.

Esta idea fue considerada en los primeros días del programa espacial porque la tecnología básica necesaria ya existía en nuestros actuales satélites de televisión y comunicación.

Sin embargo, para generar suficiente energía como para ser económicamente viable, estos satélites generadores de energía tendrían que ser muy grandes, al menos un kilómetro por cada lado, por lo que el costo de los numerosos lanzamientos espaciales se consideró demasiado caro como para valer la pena.


Para comparar, la Estación Espacial Internacional requirió docenas de lanzamientos espaciales y costó 150 mil millones de dólares estadounidenses, y solo tiene el tamaño de un campo de fútbol.

Pero ahora que el costo de los vuelos espaciales se ha reducido drásticamente gracias a compañías como SpaceX, los científicos están reconsiderando esta idea.

Grupos en China, India, el Reino Unido e incluso el Laboratorio de Investigación Naval de los Estados Unidos están trabajando en sus propias tecnologías de energía solar basadas en el espacio.

El dispositivo del Instituto de Tecnología de California ha estado en desarrollo desde 2011. Fue lanzado al espacio en enero de 2023 con una matriz solar de solo 1.8 metros.

Llevaba una colección de 32 tipos diferentes de células solares de bajo costo, electrónica para convertir la luz solar en microondas y dos transmisores de microondas livianos que enviaban señales a la Tierra.

El problema más grande surgió durante las pruebas de su tecnología de despliegue, cuando los cables utilizados para desplegar la estructura en el espacio se enredaron, retrasando el proceso.

Afortunadamente, los operadores en la Tierra pudieron utilizar cámaras en la nave espacial para identificar el problema y eventualmente resolverlo.

Luego, parte de la estructura quedó bloqueada y los operadores tuvieron que vibrar mecánicamente todo el satélite para liberarlo.

Pero eso es precisamente para lo que sirven los vuelos de prueba, para identificar problemas y evitar que vuelvan a ocurrir en el futuro.

Si hay dificultades para desplegar una estructura liviana de menos de dos metros de ancho, imagínense desplegar algo del tamaño de un pequeño pueblo en el espacio.

A medida que continuamos buscando fuentes de energía limpia y los costos del cambio climático siguen aumentando, es posible que el costo de construir estaciones de generación de energía solar en el espacio se vuelva más razonable, especialmente a medida que comencemos a mirar más allá del planeta para satisfacer nuestras crecientes necesidades energéticas.