La Comunidad de Madrid destinará aproximadamente 104 millones de euros en un nuevo acuerdo para garantizar atención residencial a menores en situación de protección, asegurando recursos y programas que favorecen su bienestar y estabilidad social.

La Comunidad de Madrid ha aprobado una inversión superior a los 100 millones de euros, específicamente alrededor de 104 millones, en el marco de un nuevo Acuerdo Marco destinado a la atención residencial de niños y adolescentes en situación de protección.
Esta iniciativa, que se extiende por un período de cuatro años, tiene como objetivo mantener y mejorar las condiciones de acogimiento en diferentes recursos residenciales.
El acuerdo permitirá ofrecer 354 plazas en diversos centros especializados, distribuidos en unidades más pequeñas que fomentan un ambiente familiar y cercano.
La estructura de estos hogares facilita la convivencia y contribuye a que los menores puedan desarrollar su independencia y bienestar emocional en un entorno seguro, cercano a otros recursos sociales, sanitarios, educativos y deportivos.
Desde hace décadas, la protección infantil en Madrid ha evolucionado hacia modelos más centrados en el interés superior del menor, priorizando la atención personalizada y promoviendo la integración social de los jóvenes.
Estos recursos están diseñados para ofrecer un soporte temporal, ya que la finalidad principal es la reincorporación de los menores a sus familias o, en su defecto, su integración en entornos estables y de apoyo.
El nuevo Acuerdo Marco establece condiciones claras para los adjudicatarios, quienes deberán garantizar programas específicos que aseguren la permanencia en el centro y promuevan la convivencia entre hermanos, en casos en los que compartan recurso.
Además, los centros deberán situarse en áreas próximas a otros recursos sociales y de ocio, facilitando así la inclusión social de los menores.
Este tipo de atención siempre se brinda con carácter temporal, y profesionales especializados trabajan en la red de protección infantil con la finalidad de fortalecer lazos familiares y facilitar la transición de los jóvenes, siempre que las circunstancias lo permitan.
La intención es que estos recursos funcionen como un paso previo a una vida autónoma o a la reunificación familiar, en la medida de lo posible.
Cabe destacar que la inversión realiza un incremento en comparación con años anteriores, reflejando el compromiso de la Comunidad de Madrid por fortalecer sus políticas de protección infantil.
La cantidad destinada es equivalente a aproximadamente 99 millones de euros, considerando la tasa actual de cambio (1 EUR ≈ 1,05 USD), y reafirma la prioridad de garantizar recursos adecuados para los menores en situación de vulnerabilidad.
En la historia reciente, Madrid ha sido pionera en la implementación de modelos innovadores en protección infantil, a partir de la revisión de su ley de protección a la infancia en 2019, que estableció nuevas directrices para mejorar la calidad de los recursos residenciales y promover la participación de las familias y la comunidad.
La inversión anunciada se suma a estos esfuerzos, fortaleciendo la red de atención y asegurando que los menores en situación de protección tengan acceso a recursos dignos, cercanos y ajustados a sus necesidades específicas.