Un grupo de cinco estudiantes de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid ha obtenido el segundo premio en los premios de la Sociedad Madrileña de Nefrología, reconociendo su trabajo durante rotaciones en el Hospital Universitario Infanta Leonor y resaltando la importancia del diagnóstico precoz en patologías renales complejas.

Estos premios, destinados a estudiantes de cuarto, quinto y sexto curso de Medicina en la Comunidad de Madrid, buscan fomentar el conocimiento y la especialización en el campo de la Nefrología.
La ceremonia de entrega tuvo lugar en el marco de la reunión anual de la sociedad, donde se reconocieron los mejores casos clínicos presentados por futuros profesionales de la salud.
El trabajo, titulado “Las pistas en la piel”, fue desarrollado durante la rotación en el Servicio de Nefrología del Hospital Universitario Infanta Leonor, uno de los centros más destacados en la atención renal en la región.
Los autores del caso, María Hornero Vázquez, Juan Manuel Osuna Flores, Natalia Pavón Muñoz, Paloma Prieto Doblado y María Soriano Izquierdo, supuestamente demostraron un gran nivel de conocimiento y sensibilidad clínica en la identificación de signos que pueden indicar patologías renales severas.
Supuestamente, el caso clínico se centró en un paciente de 47 años con esclerosis sistémica crónica difusa, una enfermedad autoinmune rara que puede afectar múltiples órganos, incluyendo la piel y los riñones.
Durante su evolución, el paciente desarrolló un fracaso renal agudo acompañado de microangiopatía trombótica, complicación que requiere de un diagnóstico rápido y preciso para evitar consecuencias mortales.
La importancia de detectar estos síntomas a tiempo fue uno de los aspectos destacados del trabajo de los estudiantes, quienes supuestamente demostraron una gran capacidad para integrar datos clínicos y realizar un diagnóstico precoz.
Que cuentan con una larga tradición en la enseñanza de la Medicina
Este reconocimiento no solo refleja el talento de los futuros médicos, sino también la relevancia de la formación práctica en hospitales públicos madrileños, que cuentan con una larga tradición en la enseñanza de la Medicina.
La experiencia en rotaciones como esta, que combinan la atención clínica con la investigación, es fundamental para preparar a los profesionales que enfrentan patologías complejas y de alta morbimortalidad.
Durante el mismo evento, la doctora Patricia de Sequera, jefa del Servicio de Nefrología del Hospital Universitario Infanta Leonor, fue nombrada Miembro de Honor de la Sociedad Madrileña de Nefrología, en reconocimiento a su trayectoria y contribuciones al avance del conocimiento en enfermedades renales.
Presuntamente, su participación en numerosos proyectos de investigación y su liderazgo en la formación de jóvenes médicos han sido claves para consolidar la reputación del hospital en este campo.
Supuestamente, la doctora Sequera fue también la primera mujer en formar parte de la primera junta directiva de la Sociedad Madrileña de Nefrología, un dato que refleja los avances en igualdad en un ámbito tradicionalmente dominado por hombres.
Este doble reconocimiento reafirma el compromiso del hospital y de la comunidad médica madrileña con la excelencia, la innovación y la formación continua en nefrología, un área que cada año presenta nuevos retos debido al envejecimiento de la población y al incremento de enfermedades crónicas relacionadas con la salud renal.