Un taller de 30 horas en Arganda del Rey reúne a profesionales del SUMMA 112 para formar en la respuesta a incidentes con múltiples víctimas y agentes NRBQ.

Durante un periodo de 30 horas continuas, un equipo de profesionales del Servicio de Urgencias Médicas de la Comunidad de Madrid (SUMMA 112) participó en un #taller enfocado en la respuesta a incidentes que involucren múltiples víctimas en entornos con agentes nucleares, radiológicos, biológicos y químicos (NRBQ).
El evento, que tuvo lugar los días 22 y 23 de marzo, reunió a diez expertos del SUMMA 112, que incluía médicos, enfermeros y Técnicos en Emergencias Sanitarias, todos ellos con una especialización en la intervención en situaciones que conllevan riesgos NRBQ.
Este taller, que se desarrolló bajo la dirección del Departamento de Catástrofes y Servicios Especiales del SUMMA 112, también contó con la presencia de profesionales de otros servicios de #emergencias de distintas partes de España como participantes.
El enfoque del taller fue la atención a múltiples víctimas en un escenario de emergencia, simulando un accidente químico. Se realizaron actividades teóricas y prácticas que incluían estaciones de triaje, colocación y retirada de Equipos de Protección Individual (EPI), así como la zonificación y organización de estructuras de descontaminación.
Estas estaciones fueron impartidas por miembros del SUMMA 112, quienes compartieron su experiencia y conocimientos.
Una de las principales características de esta actividad fue la realización de un simulacro que involucraba la atención a diez víctimas tras una explosión en una industria química.
Este ejercicio práctico permitió a los asistentes aplicar las técnicas aprendidas durante el taller y mejorar su preparación ante situaciones reales de emergencia
Este ejercicio práctico permitió a los asistentes aplicar las técnicas aprendidas durante el taller y mejorar su preparación ante situaciones reales de emergencia.
Este evento marca un hito en España, siendo la primera #formación de su tipo que se organiza a nivel nacional, a completo despliegue y con una duración de 30 horas sin interrupciones.
Las jornadas no solo proporcionaron valiosas habilidades y técnicas a los profesionales del sector, sino que también fomentaron un ambiente de colaboración entre distintos cuerpos de emergencias, esencial para mejorar la efectividad de la respuesta ante desastres y situaciones críticas.
La importancia de estas formaciones es evidente si se considera el contexto de emergencias a nivel global. A medida que los riesgos relacionados con sustancias químicas y agentes NRBQ parecen aumentar, la necesidad de una preparación adecuada para manejar tales incidentes se vuelve cada vez más crucial.