Investigadores hallan una cámara oculta debajo del famoso Tesoro de Petra, revelando secretos sobre la antigua civilización nabatea.

Hace aproximadamente 2000 años, el poderoso y antiguo reino de los nabateos talló a mano una ciudad en los acantilados de arenisca de Petra, en Jordania.

En el corazón de esta ciudad se encuentra una imponente estructura de 12 columnas, conocida como el Tesoro.

Desde su descubrimiento, arqueólogos han intentado desentrañar el propósito de esta construcción, con algunas teorías apuntando a que podría haber sido un mausoleo construido como el lugar de descanso final de un gobernante importante de esta época.

Recientemente, un equipo de investigadores ha revelado un descubrimiento impresionante: una cámara oculta bajo el Tesoro, también conocido como al-Khazneh, que contiene los restos de 12 personas y otros objetos que, según afirman, podrían finalmente despejar las incógnitas sobre la estructura y arrojar luz sobre los orígenes de Petra, que fue designada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1985.

"Este descubrimiento es asombroso", manifestó Pearce Paul Creasman, director ejecutivo del Centro Americano de Investigación, quien lideró la excavación, en un correo electrónico dirigido al Washington Post.

"Este trabajo iluminará el Tesoro en sí, en particular su construcción y fecha.

El material recuperado de nuestra excavación tiene un gran potencial para informarnos sobre la historia temprana de Petra y, posiblemente, sobre los orígenes de los nabateos también".

Josh Gates, presentador de la serie de televisión de Warner Bros, Expedition Unknown, comentó: "Estábamos absolutamente sorprendidos por la revelación de esta cámara oculta". El descubrimiento fue destacado en el programa en un episodio de dos partes que se emitió la semana pasada.

Creasman agregó que los restos humanos podrían ayudar a desvelar cómo vivían los nabateos, cuyo reino se extendió desde aproximadamente el siglo IV a.C. hasta el 106 d.C., y cómo enterraban a sus fallecidos.

Se espera que sea posible incluso recuperar ADN antiguo de los restos encontrados.

Las excavaciones también podrían ofrecer una mejor comprensión del entorno en el que vivieron y prosperaron los habitantes de Petra.

"Hoy en día, Petra, la Ciudad Rosa, está seca, pero alguna vez fue un lugar relativamente exuberante.

Tengo la esperanza de que podamos aprender del pasado y utilizarlo para mejorar nuestro futuro colectivo", afirmó Creasman.

La ciudad de Petra, famosa por su hermosa arquitectura tallada en roca y sistemas de agua ingeniosos, fue un próspero cruce de caminos de comercio en la antigüedad, conectando importantes rutas entre Arabia, Egipto y el Mediterráneo.

La continuación de estos descubrimientos arqueológicos no solo enriquecerá nuestras comprensión de esta fascinante civilización, sino que también nos recordará la herencia cultural que perdura en estos vestigios.

Este reciente hallazgo subraya la importancia de seguir investigando las maravillas de Petra, un sitio que ha fascinado a investigadores y turistas por igual durante siglos.

Cada nuevo descubrimiento abre una ventana al pasado, permitiéndonos aprender y reflexionar sobre el increíble legado de las civilizaciones antiguas.