El gobierno de Australia y la administración de Biden han alcanzado un acuerdo histórico para facilitar el acceso a datos electrónicos de empresas estadounidenses como Microsoft y Meta por parte de las agencias de cumplimiento de la ley australianas. El objetivo es combatir el terrorismo, el abuso sexual infantil y otros delitos transnacionales.

En World / North America, AdvertisementWashington: Las agencias de cumplimiento de la ley de Australia que luchan contra el terrorismo, el abuso sexual infantil y otros delitos transnacionales tendrán un amplio acceso a datos electrónicos alojados en EE.UU. por parte de empresas como Microsoft y Meta, según un acuerdo histórico entre el gobierno de Albanese y la administración de Biden.

En medio de las tensiones continuas por la guerra entre Israel y Hamas, el gobierno federal también está examinando de cerca las leyes de crímenes de odio de Estados Unidos mientras prepara su ofensiva contra la discriminación religiosa en Australia.

El fiscal general Mark Dreyfus durante una conferencia de prensa en el Parlamento en Canberra en diciembreCrédito: Alex Ellinghausen"Tenemos leyes de crímenes de odio limitadas en Australia, pero es otro tema que, como gobierno, nos interesa analizar", dijo el fiscal general Mark Dreyfus a este medio durante su visita a Washington.

"Es una preocupación compartida entre nosotros y la administración de Biden hacer más para enfrentar el odio en nuestras comunidades, para enfrentar la islamofobia y el antisemitismo dondequiera que lo veamos".

Los comentarios de Dreyfus se produjeron después de reunirse con el fiscal general de EE.UU. Merrick Garland para aprobar un acuerdo que, según ellos, "transformará y mejorará" la cooperación internacional entre los dos países.El fiscal general de EE.UU. Merrick GarlandCrédito: APUnder el acuerdo, las autoridades de EE.UU. y Australia podrán acceder de manera más oportuna a datos electrónicos de los proveedores de servicios en la nación socia, con el fin de prevenir, detectar e investigar delitos graves.En el caso de Australia, las agencias de cumplimiento de la ley podrán acceder a datos de empresas con sede en EE.UU., como Microsoft o Meta (anteriormente Facebook), un proceso que antes podía llevar meses porque requería la aprobación de ambos gobiernos.La información solicitada podría incluir archivos necesarios cargados en un servicio de almacenamiento o copia de seguridad, correos electrónicos e historial de chat, datos de geolocalización, direcciones IP y la identidad de los remitentes de los mensajes.