El Gobierno Vasco y el Ayuntamiento de Getxo supervisan el desarrollo de un proyecto que sumará 58 viviendas protegidas en alquiler, con entrega prevista para el primer trimestre de 2026. La iniciativa busca facilitar el acceso a hogares asequibles y responder a la demanda creciente en la región.

En la localidad de Getxo, en el País Vasco, se han realizado importantes avances en el ámbito de la vivienda social. Este lunes, Denis Itxaso, consejero de Vivienda y Agenda Urbana del Gobierno Vasco, junto a Amaia Aguirre, alcaldesa del municipio, visitaron las nuevas instalaciones que forman parte de un ambicioso proyecto de construcción de 58 viviendas protegidas en régimen de alquiler, ubicadas en la calle Areneazpi 49 en la zona de Iturribarri.
Este proyecto, cuya entrega se prevé para el primer trimestre de 2026, forma parte de los esfuerzos institucionales para ampliar la oferta de viviendas públicas disponibles en Getxo.
La inversión total en la urbanización y construcción asciende a aproximadamente 6,85 millones de euros, equivalentes a unos 7,35 millones de dólares estadounidenses, y cuenta con el respaldo de fondos europeos de la iniciativa Next Generation UE, que aportan cerca de 1,7 millones de euros (unos 1,8 millones de dólares).
Además, la cesión gratuita del terreno por parte del ayuntamiento y la bonificación del 95% en impuestos de construcción han sido fundamentales para el desarrollo del proyecto.
Durante la visita, Itxaso señaló que el Gobierno Vasco ha puesto un énfasis especial en incrementar la disponibilidad de viviendas en el municipio.
"Hemos desarrollado un esfuerzo decidido para ofrecer al menos 180 nuevas viviendas de alquiler protegidas en los próximos meses en Getxo," afirmó. Además, destacó que estas nuevas viviendas se suman a otras en diferentes zonas del municipio, como las de Sarrikobaso y la calle Rosario Larrinaga, que también están en fases de finalización.
La promoción de Iturribarri consta de viviendas de dos y tres habitaciones. En total, 46 de ellas cuentan con dos dormitorios, incluyendo tres diseñadas para personas con movilidad reducida, mientras que las otras 12 ofrecen tres habitaciones.
El edificio, de estructura moderna y eficiente, tiene un diseño que prioriza la integración en el entorno urbano, con fachadas aisladas térmicamente y sistemas de ventilación con recuperación de calor, además de un campo fotovoltaico en la cubierta que proporciona energía renovable al inmueble.
La Junta de Castilla y León impulsará la construcción de 31 viviendas para jóvenes en Villímar con una inversión millonaria
La Junta de Castilla y León anuncia un nuevo proyecto para facilitar el acceso a la vivienda de los jóvenes en Burgos, con la construcción de 31 viviendas en Villímar y una inversión superior a 4 millones de euros, priorizando la sostenibilidad y eficiencia energética.El edificio ocupa una parcela con forma poligonal y su diseño respeta las normativas urbanísticas, incluyendo un uso racional del espacio y medidas de seguridad frente a inundaciones.
La edificación se compone de unas cinco plantas residenciales, con un sótano doble destinado a garajes y espacios comunes, facilitando también la movilidad y accesibilidad para todos los futuros residentes.
Desde el punto de vista económico, la obra ha generado una inversión cercana a los 7,1 millones de euros (unos 7,6 millones de dólares), con fondos procedentes en parte de ayudas europeas y aportaciones públicas municipales.
La colaboración entre el Ayuntamiento y el Gobierno Vasco ha sido clave para llevar adelante este proyecto, que además contempla la urbanización de los espacios exteriores para ofrecer un entorno amigable y accesible.
Actualmente, en Getxo existen 7.714 unidades convivenciales inscritas en el sistema de solicitudes de vivienda protegida, Etxebide, de las cuales más del 68% están interesadas en modalidades de alquiler.
La demanda de viviendas asequibles sigue en aumento, especialmente entre jóvenes y unidades familiares con bajos ingresos, que requieren pisos con rentas mensuales que oscilan entre los 600 y los 2.800 euros (unos 640 a 3.000 dólares). La tendencia refleja una necesidad urgente de ampliar la oferta de viviendas públicas para equilibrar el mercado y garantizar el acceso a una vivienda digna.
El consejero Itxaso reiteró la importancia de que la vivienda protegida sea un instrumento de justicia social y cohesión social en Euskadi, especialmente en municipios como Getxo, donde la presión demográfica y económica es considerable.
La visión de las instituciones pasa por seguir impulsando proyectos similares y fortalecer las políticas públicas que faciliten el acceso a hogares adecuados y sostenibles, promoviendo un desarrollo urbanístico que favorezca la calidad de vida de todas las vecinas y vecinos del municipio.