El Gobierno Vasco firma un memorándum de entendimiento con la multinacional Hithium para fabricar en Euskadi sistemas de almacenamiento estacionario, promoviendo la industrialización y sostenibilidad en la transición energética europea.

En el contexto de la creciente penetración de energías renovables en Europa, especialmente la eólica y la solar, la necesidad de soluciones avanzadas de almacenamiento energético se vuelve cada vez más prioritaria.
Euskadi, la región del País Vasco en España, ha dado un paso importante para posicionarse como referente en esta área mediante la firma de un memorándum de entendimiento (MoU) con Hithium, una de las principales empresas mundiales en fabricación de baterías estacionarias.
Este acuerdo, celebrado en la feria internacional 'The Smarter E Europe' en Múnich, supone un impulso estratégico para convertir a Euskadi en un polo de referencia en la fabricación y desarrollo de sistemas de almacenamiento energético en Europa.
La colaboración contempla tres ejes principales: el desarrollo tecnológico conjunto, la participación activa de empresas vascas en el proyecto y la promoción de la economía circular en la fabricación de baterías.
El objetivo de estos esfuerzos es que Euskadi no solo sea un nodo de comercialización, sino también un centro de producción e innovación para la Unión Europea.
Para ello, se invertirá en infraestructuras y capacidades que permitan a la región fabricar sistemas de almacenamiento estacionario de alta calidad, reduciendo la dependencia de importaciones y fomentando la creación de empleo local en un sector estratégico.
El consejero de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad del País Vasco, Mikel Jauregi, destacó que 'hemos trabajado durante años en el desarrollo de soluciones sostenibles para almacenar energía.
Lo que buscamos ahora es que la fabricación de estas tecnologías se realice en Euskadi, usando nuestros centros tecnológicos y nuestra industria. La firma con Hithium marca un gran avance en esa dirección'. Además, resaltó que la región cuenta con productores de primer nivel en bienes y equipamiento eléctrico, lo que garantiza una base sólida para el crecimiento industrial.
El acuerdo también tiene un importante componente fiscal, ya que las baterías estacionarias están incluidas en el Listado Vasco de Tecnologías Limpias, lo que implica una deducción fiscal del 35%, incentivando así la inversión y la innovación en este campo.
La apuesta del Gobierno Vasco está alineada con su estrategia de promover una transición energética justa, eficiente y con bajas emisiones, en la que la sostenibilidad y la competitividad industrial son claves.
Hithium, fundada en 2019 y con sede en Xiamen, China, ha expandido su presencia internacional rápidamente, operando en países como Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Turquía, Dubái, Singapur y Australia.
La colaboración con Euskadi busca que la firma localice capacidades de producción en Europa, atendiendo a los altos estándares técnicos del continente y adaptándose a las necesidades del mercado europeo.
Esta iniciativa se enmarca en un contexto global en el que la Unión Europea está apostando decididamente por energías renovables, con objetivos ambiciosos de descarbonización y reducción de emisiones.
La estrategia europea prevé que, para 2030, al menos un 40% del consumo energético proceda de fuentes renovables, lo que exige una inversión masiva en tecnologías de almacenamiento para mantener la estabilidad y fiabilidad de la red.
En resumen, el acuerdo entre Euskadi y Hithium representa un paso firme hacia una industria energética más sostenible, eficiente y moderna. La región no solo busca fortalecer su posición en el mercado europeo, sino también contribuir activamente a la lucha contra el cambio climático mediante la innovación en almacenamiento energético, generando empleo y valor añadido en su economía.
Este compromiso se enmarca en la visión del Gobierno Vasco de fomentar más industria, mejor industria y menos emisiones, en línea con su estrategia de desarrollo sostenible y transición energética a largo plazo.
La apuesta por la fabricación local de baterías estacionarias en Euskadi, además de reducir la vulnerabilidad ante cortes de suministro eléctrico, genera oportunidades para que la región lidere la economía verde en el sur de Europa y más allá.