Se está evaluando un nuevo circuito de cribado de cáncer de cuello uterino basado en la prueba de detección del virus del papiloma humano mediante automuestra en las farmacias. El objetivo es incrementar la cobertura de la detección precoz de este virus.
En Cataluña, se está llevando a cabo una evaluación de un innovador circuito de cribado de cáncer de cuello uterino.
Este nuevo sistema se basa en la utilización de automuestras tomadas en las farmacias para detectar el virus del papiloma humano.
El principal objetivo de esta iniciativa es aumentar la cobertura en la detección temprana de este virus, que puede causar graves problemas de salud en las mujeres.
La fase piloto de este proyecto se está desarrollando en siete municipios del Baix Llobregat, donde se han seleccionado varias farmacias para realizar las pruebas.
Es importante destacar que la participación en este programa es de carácter voluntario y completamente gratuita.
Desde julio de 2021 hasta mayo de este año, más de 3.000 mujeres han realizado las pruebas de cribado.
Si los resultados de esta fase piloto son satisfactorios, se planea que este nuevo Protocolo sustituya a la citología como prueba primaria de cribado en mujeres mayores de 30 años y hasta los 65 años.
Esta iniciativa se suma a otras colaboraciones importantes que las farmacias han llevado a cabo en cuanto a cribado.
Por un lado, destaca el Programa de Detección Precoz de Cáncer de Colon y Recto, que ha tenido una gran acogida y ha permitido detectar casos en etapas tempranas.
Por otro lado, durante la pandemia, las farmacias también colaboraron en el programa de cribado de la covid-19, proporcionando tests rápidos de antígenos a la población.
Estas acciones demuestran la importancia del papel de las farmacias en la detección de enfermedades y la promoción de la salud en la comunidad.