Las obras en el Puente Labruna en Núñez avanzan rápidamente y prometen mejorar significativamente la movilidad y la integración de la zona, beneficiando a más de 350 mil habitantes y reduciendo los tiempos de traslado.
Las obras de ampliación y renovación del Puente Labruna en el barrio de Núñez, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, están en plena etapa de desarrollo y prometen revolucionar la conectividad de la zona.
Situado cerca del emblemático estadio de River Plate, este proyecto tiene como objetivo principal mejorar la movilidad y facilitar el paso entre distintas áreas de la ciudad, beneficiando a más de 350 mil personas que transitan a diario por la región.
El Puente Labruna, que forma parte de un plan estratégico del Gobierno porteño, será ampliado y renovado para integrar mejor la ciudad con la Costanera, uno de los principales corredores urbanos que conecta diferentes barrios y zonas de interés.
La obra contempla la incorporación de nuevas ramas vehiculares en las avenidas Lugones y Cantilo, así como una pasarela peatonal más grande y segura, que facilitará el cruce peatonal y ciclista en la zona.
Este proyecto, ejecutado por Autopistas Urbanas Sociedad Anónima (AUSA), tiene un plazo estimado de 24 meses, por lo que se espera que la inauguración se realice a mediados de 2026.
La inversión, que en euros equivale a aproximadamente 3,5 millones, busca no solo reducir los tiempos de desplazamiento, sino también disminuir los niveles de congestión y contaminación en la zona, que rodea a importantes puntos de interés como el Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (CeNARD), la Ciudad Universitaria de la Universidad de Buenos Aires, la Reserva Ecológica Norte y el Parque de la Memoria.
El diseño de la obra incluye la construcción de una rama Nordeste que conectará Lugones con Cantilo, además de un puente cajón para el paso de la bajada de Lugones a Udaondo.
Sobre estas estructuras, se levantará una nueva pasarela peatonal, que potenciará la movilidad no motorizada y mejorará la accesibilidad para ciclistas y peatones.
En paralelo, se proyecta la construcción del Anillo de La Pampa, un túnel que atravesará debajo de la Avenida Lugones y un puente peatonal elevado sobre la autopista Illia.
Estas obras complementarias buscan reducir aún más los tiempos de traslado y fortalecer la conexión de la ciudad con el río y el aeropuerto de Buenos Aires, además de convertirse en íconos urbanos.
El avance en las obras se realiza en fases, priorizando la minimización de las interrupciones en el tránsito. Se han implementado desvíos alternativos y calzadas provisionales, como la calle La Pampa, para mantener la circulación en la zona. La reconfiguración del puente también contempla la expansión del tablero y la eliminación de la antigua pasarela peatonal, que será desplazada a un lado para facilitar el cruce peatonal y ciclista.
Estas mejoras no solo buscan optimizar la movilidad y reducir los tiempos de viaje, sino que también generan un impacto positivo en la calidad de vida de los habitantes y en la protección del medio ambiente.
La historia de las obras en la infraestructura urbana de Buenos Aires refleja una constante apuesta por modernizar la ciudad, desde la construcción de puentes históricos hasta los nuevos proyectos de movilidad sustentable.
En definitiva, la renovación del Puente Labruna en Núñez representa un paso importante hacia una ciudad más integrada, eficiente y amigable con el medio ambiente, alineada con las tendencias globales de urbanismo y movilidad inteligente.
Se espera que, con estos cambios, la zona no solo mejore en funcionalidad, sino que también se convierta en un ejemplo de planificación urbana moderna y sostenible en la capital argentina.