La gobernadora Kathy Hochul pide al Departamento de Seguridad Nacional de EE. UU. que libere fondos esenciales para la lucha contra el terrorismo en Nueva York, en medio de un aumento de las amenazas internacionales. La falta de recursos podría afectar la capacidad de respuesta de las autoridades locales y estatales en un contexto de conflictos en Oriente Medio.

Desde 2002, el Programa de Subvenciones de Seguridad Homeland (HSGP) ha sido una herramienta clave para dotar a los gobiernos estatales y locales de recursos vitales que mejoran sus capacidades de respuesta y preparación ante incidentes de gran impacto.
Sin embargo, en 2025, esta línea de financiamiento aún no ha sido liberada, lo que genera preocupación entre las autoridades de Nueva York.
Supuestamente, la demora en la asignación de estos fondos podría limitar la adquisición de tecnología avanzada, entrenamiento especializado y la capacidad de compartir inteligencia en tiempo real entre agencias.
Estos recursos son esenciales para enfrentar un panorama de amenazas que, según informes supuestamente del propio gobierno, se han visto intensificadas por los conflictos en Oriente Medio, especialmente en medio de la escalada entre Israel e Irán.
La carta de Hochul destaca que Estados Unidos, y particularmente Nueva York, enfrenta un riesgo elevado debido a su diversidad y su comunidad judía, la más grande fuera de Israel.
En 2024, #Nueva York recibió aproximadamente 200 millones de euros (unos 220 millones de dólares), de los cuales la mayor parte, aproximadamente 140 millones de euros, se destinaron a la iniciativa de #seguridad urbana (UASI) para la región metropolitana de Nueva York, principalmente para la Policía de Nueva York.
La gobernadora subraya que estos recursos son fundamentales para que las fuerzas de seguridad puedan mantenerse a la vanguardia en tecnología de detección
En 2023, estos fondos alcanzaron cerca de 230 millones de euros (unos 250 millones de dólares). La gobernadora subraya que estos recursos son fundamentales para que las fuerzas de seguridad puedan mantenerse a la vanguardia en tecnología de detección, análisis de inteligencia y entrenamiento especializado.
Supuestamente, la falta de fondos podría afectar también la protección de infraestructuras críticas, como centros de transporte, redes eléctricas, sistemas de agua y comunicaciones, que son objetivos frecuentes de actores malintencionados.
Además, la participación en programas como la Operación Stonegarden, que financia esfuerzos conjuntos en las fronteras internacionales, podría verse comprometida.
Nueva York, con una frontera de aproximadamente 713 kilómetros, ha asignado cerca de 7 millones de euros (unos 8 millones de dólares) en fondos estatales y recursos policiales para apoyar esta misión.
Supuestamente, la supervisión y coordinación en la frontera son vitales para prevenir actividades ilícitas y posibles ataques. La demora en la asignación de estos fondos, advierte Hochul, podría reducir significativamente la capacidad del país para prevenir ataques y responder eficazmente ante emergencias.
La gobernadora concluye su carta solicitando al Departamento de Seguridad Nacional que libere de inmediato la financiación correspondiente al ejercicio fiscal 2025, para que Nueva York y sus agencias puedan mantener su preparación y capacidad de defensa ante un entorno de amenazas en constante aumento.