Un estudio de 2019 reveló que aproximadamente 9,2 millones de canadienses, alrededor del 37 por ciento de la población, habían experimentado tinnitus en 2018. Esto ha llevado a algunos científicos a buscar formas de tratar el problema, incluida una técnica para reentrenar el cerebro y silenciar el zumbido.

El tinnitus puede sonar como un timbre en los oídos o un silbido en la cabeza, y puede ser constante y perturbador para las personas que lo padecen.

Ken Jones ha escuchado un fuerte silbido en sus oídos durante casi 40 años, describiéndolo como un sonido similar al de una línea eléctrica.

El sonido comenzó después de dos colisiones menores en 1984 y 1999, y ha afectado su sueño y motivación para trabajar.

Según Sylvie Hébert, profesora de audiología en la Universidad de Montreal, el tinnitus generalmente es causado por pérdida de audición, daño auditivo o lesiones en la cabeza.

No tiene fuentes externas, por lo que otros no pueden escucharlo.

Sin embargo, para algunos, es un sonido molesto que puede dificultar la vida.

La técnica de neuromodulación bimodal es una de las formas en las que los científicos están tratando de tratar el tinnitus.

Esta técnica se basa en la plasticidad cerebral, la capacidad del sistema nervioso para cambiar su actividad en respuesta a estímulos intrínsecos o extrínsecos, y utiliza modalidades sensoriales como el sonido y el tacto para regular y cambiar las conexiones maladaptativas que interfieren con la vida diaria de una persona.

Uno de los dispositivos que intenta hacer esto es Lenire, desarrollado por Neuromod Devices.

El dispositivo consiste en auriculares y un dispositivo bucal que los pacientes usan todos los días durante al menos seis semanas.

Los auriculares emiten sonidos en una variedad de frecuencias y el dispositivo bucal ofrece pulsos eléctricos suaves a la lengua.

Aunque los resultados de los ensayos clínicos de Lenire son alentadores, Neuromod Devices reconoce que su dispositivo no es adecuado para todos.

Como señala Hébert, el tinnitus es una experiencia íntima sin una fuente externa para el sonido, por lo que es difícil encontrar una solución única que funcione para todos.

A pesar de los desafíos, los investigadores continúan buscando formas innovadoras de tratar el tinnitus y mejorar la calidad de vida de quienes lo padecen.