Katy Perry y un equipo de mujeres pioneras realizan un viaje histórico al espacio a bordo de un cohete de Blue Origin.

El pasado lunes, una tripulación compuesta exclusivamente por mujeres, que incluye a la famosa cantante Katy Perry, despegó con éxito hacia el espacio a bordo de un cohete de Blue Origin.
Este lanzamiento, que se llevó a cabo desde el sitio de lanzamiento de la compañía en West Texas, marca un hito significativo en la exploración espacial, al ser la primera misión de este tipo en más de sesenta años.
La ventana de lanzamiento se abrió a las 15:30 horas (hora central europea), y el cohete New Shepard, que mide 18 metros de altura, llevó a las astronautas a alcanzar la línea Kármán, el límite internacionalmente reconocido del espacio.
Este evento histórico no solo destaca la importancia del empoderamiento femenino en campos como la ciencia y la tecnología, sino que también subraya los avances que se han logrado a lo largo de las últimas décadas en la inclusión de mujeres en el sector espacial.
Entre las integrantes de la tripulación se encontraban la astrofísica Aisha Bowe, la activista y investigadora en bioastronáutica Amanda Nguyen, y la cineasta Kerianne Flynn, quienes acompañaron a Perry y a las periodistas Gayle King y Lauren Sanchez, esta última prometida del multimillonario Jeff Bezos.
El vuelo experimental permitió a la tripulación experimentar unos minutos de microgravedad, una experiencia única que normalmente se reserva para astronautas entrenados.
Tras el emocionante viaje, el equipo realizó un aterrizaje controlado gracias a paracaídas en el desierto de West Texas, marcando así una nueva etapa en la historia de los vuelos espaciales.
Es interesante señalar que la última vez que se llevó a cabo una misión espacial compuesta únicamente por mujeres fue en 1963. Esa misión fue realizada por Valentina Tereshkova, la primera mujer en viajar al espacio, quien voló en una cápsula soviética. Desde entonces, han sido muchos los avances en la representación y participación de mujeres en la exploración espacial.
Este vuelo no solo representa un logro personal para las integrantes de la tripulación, sino que también simboliza una llamada a la acción para invertir en la formación y el apoyo a futuras generaciones de mujeres en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM).
A medida que las empresas privadas continúan desarrollando tecnología espacial, eventos como este serán cruciales para inspirar a las jóvenes de hoy a considerar carreras en estos campos.
La misión de Blue Origin refuerza la idea de que, si se le da la oportunidad, cualquier mujer puede alcanzar las estrellas. Con este viaje, Katy Perry y su tripulación no solo han cruzado la frontera del espacio, sino que también han dejado una huella indeleble en la historia de la exploración humana.