La Comunidad de Madrid continúa fortaleciendo su compromiso con la vivienda asequible mediante la construcción de nuevos pisos públicos en Valdemoro, sumando más de 1.000 viviendas en marcha y beneficiando a familias vulnerables en la región.

Rivas Vaciamadrid
Estas nuevas edificaciones se sumarán a las 840 viviendas ya en construcción en municipios como Majadahonda, Móstoles, Rivas Vaciamadrid, Villa del Prado y en la ciudad de Madrid, con el objetivo de ofrecer soluciones habitacionales dignas y asequibles.
El Consejo de Gobierno regional, en su reunión de hoy, ha aprobado la propuesta de adjudicación de las obras, que tendrán un plazo de ejecución de 30 meses y requerirán una inversión total de aproximadamente 37 millones de euros, equivalentes a unos 38,6 millones de euros en moneda local.
La urbanización, gestionada por la Agencia de Vivienda Social (AVS), se localizará en la calle Agustina de Aragón, e incluirá viviendas de dos dormitorios, con una docena de ellas adaptadas para personas con movilidad reducida.
Además, el proyecto contempla la construcción de garajes, trasteros y locales comerciales para facilitar la integración y la funcionalidad de la comunidad.
Los nuevos inquilinos podrán acceder a rentas bonificadas de aproximadamente 53 euros durante los primeros tres meses tras la firma del contrato. Posteriormente, el coste del alquiler será de unos 200 euros mensuales, una cifra que busca facilitar el acceso a una vivienda digna para quienes enfrentan mayores dificultades económicas.
La intención del Ejecutivo regional es, cuando comiencen las obras, a finales de 2025 o principios de 2026, superar la cifra de 1.000 viviendas en construcción en toda la comunidad, avanzando en su compromiso de ampliar los recursos de la AVS con un total de 1.687 nuevas viviendas en esta legislatura.
Actualmente, la entidad pública gestiona un patrimonio inmobiliario que supera las 50.000 propiedades distribuidas en 119 municipios, facilitando viviendas asequibles a cerca de 90.000 madrileños que enfrentan dificultades económicas. La nueva urbanización será energéticamente eficiente y se enmarca en el Plan Estatal de Acceso a la Vivienda, en el que la comunidad autónoma aporta aproximadamente el 90% de la inversión total.