El Hospital Gregorio Marañón de Madrid implementa un sistema de mapeo del corazón en tiempo real, pionero en el mundo, que mejora la seguridad y comodidad del paciente.

Matute enfatizó que "este nuevo hito refleja el deseo constante de #innovación y la superación que caracteriza a la sanidad madrileña".
Este nuevo dispositivo, conocido como Corify, consiste en un chaleco equipado con electrodos que se colocan sobre el tronco del paciente, permitiendo registrar, de manera simultánea y en solo 10 minutos, la actividad eléctrica de todas las cavidades del corazón.
Este avance brinda a los médicos la capacidad de visualizar una representación tridimensional del órgano sin la necesidad de someter al paciente a procedimientos invasivos como el cateterismo o tomografías, aumentando así la seguridad y el confort del paciente, y optimizando la detección y tratamiento de arritmias.
La consejera de Sanidad destacó que esta innovación ha sido el resultado de dos décadas de trabajo del equipo del Servicio de Cardiología del Gregorio Marañón, un referente en España en este campo, junto a profesionales de la Universidad Politécnica de Valencia.
Este esfuerzo conjunto también ganó apoyo del Instituto de Investigación Sanitaria y la Unidad de Apoyo a la Innovación del hospital.
Adicionalmente, Corify puede ayudar a reducir significativamente los costes asociados al manejo de arritmias, un área que demanda muchos recursos y atención en el sistema de salud.
Este avance no sólo mejora la experiencia del paciente, sino que también ayuda a optimizar los recursos del hospital.
La tecnología no solo se aplica en diagnósticos previos a intervenciones cardíacas, sino que también proporciona asistencia durante los cateterismos al identificar las áreas problemáticas en el corazón.
Con la certificación CE, Corify ya está disponible para uso comercial en la Unión Europea.
Representan un riesgo significativo para la salud
Las arritmias, que incluyen condiciones como la fibrilación auricular y taquicardia ventricular, representan un riesgo significativo para la salud, afectando a millones de personas a nivel mundial.
Se estima que más del 30% de los adultos experimentará algún tipo de arritmia en su vida, lo que incrementa el riesgo de mortalidad y puede causar eventos adversos como ictus o insuficiencia cardiaca, un problema que continúa creciendo.
Tradicionalmente, los métodos para evaluar el funcionamiento eléctrico del corazón son mucho menos eficaces y requieren complejos sistemas de radiología, lo que puede ser perjudicial para los pacientes.