La comunidad educativa de Valdemoro se beneficia de nuevas iniciativas para fomentar la salud y el bienestar de los estudiantes.

Este programa, desarrollado a través de la Mesa de Salud Escolar, es parte de una iniciativa más amplia que involucra a diversas instituciones, entre las que destacan el Ayuntamiento de Valdemoro, las áreas técnicas de Educación y Salud de la Comunidad de Madrid, y el Hospital Universitario Infanta Elena.
La Mesa de #Salud Escolar busca ser un instrumento de coordinación y colaboración que garantice la implementación de acciones concretas dentro de la comunidad educativa.
Para ello, se ha creado el sitio web www.saludescolar.valdemoro.es, un portal donde se podrán encontrar las campañas mensuales que se llevarán a cabo y recursos orientados a elevar el bienestar de los estudiantes y enseñarles sobre la importancia de los hábitos saludables.
La información se pondrá a disposición de los alumnos de Infantil, Primaria y Secundaria, con el fin de que todos tengan acceso a estos conocimientos cruciales.
Las actividades comenzarán con un enfoque en la salud sexual, un tema vital que se abordará en el primer mes. A lo largo del año, se tratarán una variedad de temas relevantes y contemporáneos: la importancia del sueño en marzo, la promoción de la actividad física en abril, el acoso escolar en mayo, y el uso y tráfico de drogas en junio.
Se abordará la #prevención del suicidio
Después del verano, en septiembre, se abordará la prevención del suicidio, seguido de trastornos de la conducta alimentaria en octubre, la prevención del consumo de alcohol en noviembre y, finalmente, el sida e infecciones de transmisión sexual en diciembre.
La salud escolar ha sido un tema de creciente relevancia en nuestra sociedad, especialmente en un contexto donde la salud mental y emocional de los jóvenes se ha visto afectada por diversos factores externos, incluyendo la crisis sanitaria de la pandemia Covid-19.
Esta iniciativa también intenta hacer frente a estos desafíos, proporcionando a los estudiantes herramientas para entender y gestionar su salud física y emocional.
Históricamente, los programas de salud escolar han demostrado ser efectivos para mejorar no solo el bienestar físico de los jóvenes, sino también su rendimiento académico y su disciplina.
Los estudios muestran que, cuando se implementan correctamente, estas iniciativas pueden reducir las tasas de absentismo y mejorar la calidad de vida de los alumnos.