La Comunidad de Madrid destina más de 23 millones de euros para mantener plazas residenciales y diurnas para personas con discapacidad en envejecimiento prematuro, además de avanzar en la construcción de una residencia pública en Carabanchel.

La Comunidad de Madrid ha anunciado una inversión de aproximadamente 23,7 millones de euros (equivalente a 25 millones de dólares al cambio actual de 1 EUR ≈ 1,05 USD) destinada a fortalecer la atención a personas con discapacidad intelectual en fase de envejecimiento prematuro.
La medida fue aprobada por el Consejo de Gobierno en su reunión reciente, con el objetivo de ampliar y mejorar los servicios de atención residencial y diurna en diferentes municipios de la región.
Con esta inversión, se han autorizado 18 contratos con 16 organizaciones sociales distintas, que tendrán una vigencia de un año a partir del 1 de julio de 2025.
Los recursos estarán distribuidos en residencias y centros de día situados en Madrid capital y en localidades como Torrelaguna, Aldea del Fresno, Leganés, Móstoles, Getafe, Alcalá de Henares, Ajalvir, Torrelodones, Colmenar Viejo, Valdemoro, Colmenarejo y Villanueva del Pardillo.
La finalidad es garantizar que estas personas puedan acceder a un entorno adecuado que favorezca su bienestar, autonomía y calidad de vida.
Este esfuerzo se enmarca en una estrategia más global de la Comunidad de Madrid para responder a la creciente demanda de servicios especializados para personas con discapacidades en fases de envejecimiento avanzado, fenómeno que ha ido en aumento debido al envejecimiento progresivo de la población y a mejores tratamientos médicos que permiten vivir más tiempo, pero con mayores necesidades de atención.
La inversión también refleja la voluntad de la administración regional de cumplir con los compromisos adquiridos en materia de inclusión social y derechos humanos.
Además, en línea con estos objetivos, la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales ha comenzado las obras de una nueva residencia pública en la región.
Se trata de la primera de su tipo en Madrid, destinada exclusivamente a adultos con discapacidad intelectual en etapa de envejecimiento prematuro. Esta residencia está ubicada en un histórico edificio del barrio de Carabanchel, específicamente en la finca de Vista Alegre, en el antiguo inmueble conocido como Fray Bernardino.
El proyecto de rehabilitación de esta estructura cuenta con una inversión de aproximadamente 12 millones de euros, financiados mediante fondos europeos destinados a mejorar la infraestructura social en la Unión Europea.
La residencia, que será gestionada por la Agencia Madrileña de Atención Social (AMAS), tendrá capacidad para acoger a unas 70 personas distribuidas en cinco módulos independientes, cada uno con entre 16 y 22 plazas.
El complejo ofrecerá habitaciones privadas y compartidas, salas de terapia, espacios de reunión, zonas de recreo y jardines exteriores, en un entorno diseñado para promover la integración y el bienestar mental y físico.
La apertura de esta nueva instalación está prevista para el próximo año, en 2026, y representa un paso importante en la expansión de la red de recursos públicos para personas con discapacidad en Madrid.
El Gobierno autonómico ha resaltado que esta iniciativa forma parte de un plan plurianual para mejorar la atención social y para reducir las listas de espera, además de ofrecer servicios de mayor calidad y adaptados a las necesidades de cada individuo.
Estos proyectos reflejan la tendencia de muchas comunidades autónomas en España, donde las políticas sociales están orientadas a ofrecer un sistema de cuidado más inclusivo y sostenible.
La experiencia española en la atención a personas con discapacidad ha sido pionera en Europa, contando con una legislación avanzada y un compromiso continuo por garantizar derechos y mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos más vulnerables, especialmente en un contexto de envejecimiento poblacional acelerado.