La decisión de Victoria de cancelar los Juegos de la Mancomunidad ha generado controversia y críticas por parte de la exministra de Asuntos Exteriores Julie Bishop. En medio de un foro económico global en Canadá, Bishop calificó la cancelación como un golpe fatal para el evento y una señal equivocada para otras naciones. Mientras tanto, los organizadores en Londres expresaron su sorpresa y decepción ante la decisión repentina de Victoria, y la Federación de los Juegos de la Mancomunidad está considerando acciones legales en respuesta a la retirada del contrato.

La exministra de Asuntos Exteriores Julie Bishop ha criticado la decisión de Victoria de cancelar los Juegos de la Mancomunidad, acusando al premier Daniel Andrews de dar la estocada final al evento y enviar un mensaje equivocado a otras naciones.

Bishop estaba en Canadá, otro país miembro de la Mancomunidad, presidiendo un foro económico global de líderes empresariales y políticos cuando se supo de la decisión.

Ante la pregunta de si el movimiento era un embarrasmento para Australia, la exlíder liberal respondió: 'Me sorprende que el premier haya cancelado los Juegos de la Mancomunidad de esta manera.

Está enviando un mensaje a los países de la Mancomunidad de que Australia no puede permitirse ser anfitrión de unos Juegos, cuando esperaríamos que una nación en vías de desarrollo de la Mancomunidad pudiera hacerlo.

¿Está este premier, de uno de los países más ricos del planeta, anunciando la muerte de este torneo deportivo?' preguntó Bishop, quien preside el Trust del Príncipe de Australia, una organización benéfica vinculada al Rey Carlos.

Mientras tanto, en Londres, los organizadores de los Juegos de la Mancomunidad afirmaron que el gobierno de Victoria les había asegurado en repetidas ocasiones que podía asumir los costos de organizar el evento que se desarrollaría en varios centros regionales, y que no se dieron ninguna advertencia previa antes de retirarse del contrato.

Katie Sadleir, directora ejecutiva de la Federación de los Juegos de la Mancomunidad, dijo que la cancelación de Victoria es devastadora.

La federación está considerando vías legales después de que el premier Daniel Andrews se retirara de un contrato firmado en febrero del año pasado.