El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, ha expuesto su plan de victoria a los líderes de Reino Unido, Francia e Italia en un momento crítico de la guerra con Rusia, buscando apoyo militar que le permita avanzar hacia negociaciones de paz.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, ha presentado su propuesto 'plan de victoria' a los líderes de Reino Unido, Francia e Italia, así como al nuevo dirigente de la OTAN, mientras busca conseguir respaldo militar para posicionarse de manera más favorable en las futuras negociaciones de paz con Rusia.
Según declaraciones de autoridades occidentales y del propio Zelensky, la guerra con Rusia ha alcanzado un punto crítico.
A medida que se aproxima la elección en Estados Unidos, programada para dentro de menos de un mes, y ante la llegada del invierno a Ucrania tras una serie de ataques rusos dirigidos a la infraestructura energética clave, el presidente ucraniano se muestra ansioso por que Occidente incremente su apoyo para cambiar las dinámicas en el frente de batalla.
Recientemente, Zelensky mantuvo un encuentro con el primer ministro británico Keir Starmer y el secretario general de la OTAN, Mark Rutte.
En esta reunión abordaron el discutido uso de misiles de largo alcance suministrados por aliados occidentales, con miras a atacar objetivos dentro del territorio ruso.
Esto ha sido un tema de gran importancia para Ucrania, ya que el presidente ha presionado a Estados Unidos y Reino Unido para que se unan a Francia en permitir que Ucrania utilice estos misiles.
Rutte comentó sobre el tema después de la reunión: "Lo discutimos hoy, pero al final depende de cada aliado decidir sobre este asunto". Sin embargo, un portavoz de Starmer reafirmó que no ha habido cambios en la postura del gobierno británico respecto al uso de estos misiles.
Durante una conferencia de prensa en Roma, al ser preguntado sobre una posible cumbre de paz, Zelensky afirmó que "la próxima cumbre de paz debe realizarse en noviembre.
El plan estará en la mesa... a principios de noviembre, el plan presentará todos los detalles". Sin embargo, se abstuvo de proporcionar detalles específicos sobre su plan de victoria ni se mostraba favorable ante cualquier idea de un cese al fuego.
La guerra en Ucrania, que comenzó en 2014 tras la anexión de Crimea por parte de Rusia, ha llevado a una situación complicada en el país y en las relaciones internacionales.
La invasión a gran escala de Rusia en 2022 ha elevado las tensiones y ha intensificado la necesidad de una resolución pacífica al conflicto, aunque las conversaciones y esfuerzos pasados para un acuerdo han beneficiado a pocos.
A medida que el conflicto continúa y las elecciones estadounidenses se acercan, la presión sobre los líderes europeos puede incrementar, con el fin de garantizar que se mantenga el apoyo a Ucrania durante los meses de invierno mientras enfrentan la arremetida de Rusia.
La situación es delicada y cualquier cambio en las políticas occidentales podría tener implicaciones significativas en el curso de la guerra y en el futuro de Ucrania.