Zheng Qinwen, la joven tenista china de 21 años, ha logrado alcanzar la final del Abierto de Australia, convirtiéndose en la segunda jugadora de tenis china en llegar a una final de Grand Slam. Su desempeño excepcional ha llamado la atención de importantes marcas publicitarias en China y ha sido nombrada 'Reina Wen' por la revista de moda GQ Sport. Enfrentará a Aryna Sabalenka de Bielorrusia en la final.

Zheng Qinwen siempre soñó con jugar al tenis cuando era niña.

A la edad de siete años, sus habilidades ya eran tan impresionantes que sus padres decidieron llevarla a un campamento de entrenamiento en Wuhan, a 440 kilómetros de distancia de su hogar en Shiyan, China central.

A partir de ese momento, comenzó un viaje que este sábado la llevará a disputar la final del Abierto de Australia, convirtiéndose en la segunda tenista china en alcanzar una final de Grand Slam después de su ídola Li Na, quien lo logró hace 10 años.

Zheng expresó su emoción y sorpresa por su excelente rendimiento hasta ahora, al vencer a la ucraniana Dayana Yastremska en las semifinales.

Sus logros la han catapultado de la oscuridad a los focos publicitarios en China, consiguiendo importantes contratos con marcas como McDonald's, Alipay, Swisse y Gatorade.

La revista de moda GQ Sport la apodó 'Reina Wen' el año pasado, tras una temporada destacada en la que se convirtió en la primera tenista china en ser nombrada Novata del Año por la Asociación Femenina de Tenis.

Enfrentará a Aryna Sabalenka de Bielorrusia en la final, quien también se llevó el premio a la Novata del Año en 2018 y llegó a ser la número uno del mundo.

Zheng se está convirtiendo en el próximo gran referente del tenis chino, un mercado que ha generado mucho dinero y controversia en la última década, pero que ha tenido pocos campeones.

La hazaña de Zheng ha sido motivo de orgullo para muchos chinos, incluido Li Donghao, un jugador de tenis de Beijing.

Más de 5 millones de personas en China sintonizaron para ver cómo Zheng vencía a su compatriota Wang Yafan en la tercera ronda del torneo.

Li Donghao señaló que los chinos son inteligentes y que saben soportar la adversidad y trabajar duro para alcanzar el éxito.

El camino hacia la final del Abierto de Australia no ha sido fácil para Zheng.

Después de ser dejada en Wuhan por sus padres cuando aún estaba en la escuela primaria, solo podía verlos dos veces por semana.

En una entrevista con el periódico The New York Times, Zheng confesó que lloró mucho durante ese tiempo.

Sin embargo, su determinación y perseverancia la han llevado a convertirse en una de las mejores tenistas chinas y a estar cada vez más cerca de lograr su sueño de ser campeona de Grand Slam.