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Washington: La ex candidata presidencial Nikki Haley dice que planea votar por Donald Trump en las elecciones de noviembre, meses después de advertir a los estadounidenses que EE. UU. descendería en el caos si él regresara a la Casa Blanca.

En sus primeros comentarios públicos desde la suspensión de su campaña por la nominación presidencial republicana en marzo, Haley instó una vez más al expresidente a "acercarse" a los millones de personas que la apoyaron y no dar por sentado sus votos.

En su nuevo papel como titular de la Cátedra Walter P. Stern del Instituto Hudson, un grupo de expertos con sede en Washington, Haley hizo una crítica implacable de las debilidades de seguridad nacional de Estados Unidos, diciendo que la nación necesitaba "crecer una columna vertebral", especialmente en términos de la guerra entre Israel y Hamás y el asalto continuo de Rusia a Ucrania.

Preguntada si Trump o el presidente Joe Biden harían un mejor trabajo en seguridad nacional, la ex embajadora de la ONU se detuvo brevemente antes de dar su respaldo a Trump.

"Como votante, pongo mis prioridades en un presidente que va a respaldar a nuestros aliados y responsabilizar a nuestros enemigos.

¿Quién aseguraría la frontera? Sin más excusas.

Un presidente que apoyaría el capitalismo y la libertad.

Un presidente que entiende que necesitamos menos deuda, no más deuda", dijo.

"Trump no ha sido perfecto en estas políticas, lo he dejado claro muchas, muchas veces, pero Biden ha sido una catástrofe.

Así que voy a votar por Trump." El respaldo de Haley la convierte en la última republicana en respaldar la candidatura de Trump para volver al poder, junto con otros aspirantes presidenciales como el gobernador de Florida Ron DeSantis, el senador de Carolina del Sur Tim Scott y el empresario de biotecnología Vivek Ramaswamy.

Pero su respaldo es particularmente notable dado que ambos pasaron meses atacándose mutuamente durante las contiendas primarias para los primeros estados con voto anticipado de Iowa, Nuevo Hampshire y Carolina del Sur, todos los cuales Trump ganó, a pesar de enfrentarse a cuatro juicios penales separados.

Nikki Haley, de origen indoamericano, ha sido una de las voces más prominentes del Partido Republicano y su apoyo a Trump puede tener un gran impacto en las próximas elecciones.

Con un precio de campaña en el 2016 de alrededor de 60 millones de dólares, las elecciones en EE. UU. suelen ser costosas y llenas de controversias.

Convertidos a Euros, esos 60 millones de dólares son alrededor de 50 millones de euros, una cantidad impresionante para una sola campaña.

La influencia de figuras como Haley y su respaldo a un candidato pueden determinar el éxito de una campaña, ya que atraen a un gran número de seguidores.

La política en Estados Unidos es siempre un terreno fértil para titulares sensacionalistas y giros inesperados que mantienen a la población al tanto de las novedades y los cambios en el panorama político.