En Medio Oriente, los demócratas podrían boicotear el discurso del Primer Ministro de Israel Benjamin Netanyahu ante el Congreso el próximo mes, ya que las divisiones sobre su conducta en la guerra en Gaza dividen a los líderes en Washington y Tel Aviv.

Decenas de demócratas han dicho a CNN que están considerando no asistir al discurso planificado de Netanyahu el 24 de julio, en medio de una creciente incertidumbre sobre la dirección del conflicto sangriento de nueve meses entre Israel y Hamas.

Las tensiones personales entre el presidente de EE.UU., Joe Biden, y Netanyahu también son evidentes.

La Casa Blanca canceló una reunión con funcionarios israelíes después de que Netanyahu publicara un video, el miércoles AEST, afirmando falsamente que Washington había cortado su suministro de armas.

Respecto a la visita de Netanyahu, el Representante Ro Khanna dijo el domingo: "Si quiere venir a hablar con los miembros del Congreso sobre cómo poner fin a la guerra y liberar a los rehenes, estaría bien hacerlo." "Pero no me voy a sentar en una conferencia unilateral", dijo a NBC. El senador independiente Bernie Sanders y la Representante Demócrata Alexandria Ocasio-Cortez publicaron en X, con Ocasio-Cortez diciendo: "Este hombre [Netanyahu] no debería dirigirse al Congreso.

Es un criminal de guerra... Su invitación debería ser revocada.

Nunca debería haber sido enviada en primer lugar." En Gaza, la guerra ha matado a más de 37,100 palestinos, según el Ministerio de Salud de Gaza, que no distingue entre combatientes y civiles.

La guerra ha cortado en gran medida el flujo de medicamentos, alimentos y otros suministros a los palestinos, que enfrentan una extensa hambruna.

El columnista del New York Times, Thomas Friedman, describió esta semana la motivación de la visita de Netanyahu como un intento de recompensar a los republicanos durante un año electoral en EE.UU.