Las autoridades portuguesas y alemanas vuelven a investigar la desaparición de Madeleine McCann en Lagos, en un operativo que busca esclarecer el misterio tras más de una década y media.
Las fuerzas policiales de Portugal y Alemania han reactivado este martes las operaciones de búsqueda en el municipio de Lagos, situado en la región del Algarve en el sur del país, en el marco de las investigaciones por la desaparición de la joven británica Madeleine McCann en 2007.
La reapertura de las pesquisas representa un avance significativo en un caso que ha mantenido en vilo a la opinión pública internacional durante más de 16 años.
Una fuente de la Policía Judicial portuguesa explicó a la agencia EFE que las operaciones ya están en marcha y que comenzaron en la madrugada, sin ofrecer mayores detalles sobre las acciones específicas que se están realizando.
La reanudación de las búsquedas se enmarca en una Decisión Europea de Investigación (DEI), emitida por las autoridades alemanas y autorizada por la fiscalía del distrito de Faro, en el Algarve.
La emisión de esta orden representa una colaboración transnacional que busca recopilar nuevas evidencias y esclarecer las circunstancias del caso.
Las investigaciones se concentrarán en el período comprendido entre el 2 y el 6 de junio en Lagos, una localidad que acoge Praia da Luz, donde Madeleine desapareció el 3 de mayo de 2007, cuando tenía apenas 3 años.
La operación de búsqueda se considera una de las más importantes en el marco del caso, que ha generado múltiples teorías y ha mantenido la atención de los medios y del público en todo el mundo.
Cabe recordar que Madeleine McCann, actualmente con 22 años, ha sido objeto de múltiples investigaciones y especulaciones a lo largo de los años. La tecnología moderna, incluyendo la inteligencia artificial, ha permitido crear imágenes que muestran cómo podría lucir en la actualidad, ayudando a mantener viva la esperanza de encontrarla.
La desaparición de Madeleine ha tenido un impacto profundo en la percepción pública sobre la seguridad infantil y la cooperación internacional en casos de este tipo.
El caso de Madeleine McCann también ha puesto en evidencia las dificultades que enfrentan las autoridades en la resolución de desapariciones infantiles, especialmente cuando implican varios países y jurisdicciones.
La colaboración entre Portugal, Alemania y el Reino Unido ha sido crucial en estos esfuerzos, aunque aún no se han obtenido resultados concluyentes. Las autoridades continúan trabajando con la esperanza de obtener nuevas pistas que puedan llevar a esclarecer el destino de la joven.
A lo largo de los años, diferentes hipótesis han surgido, incluyendo la posible participación de redes criminales internacionales, pero ninguna ha sido confirmada hasta la fecha.
La reanudación de las búsquedas en Lagos representa una oportunidad para avanzar en el caso y, quizás, ofrecer respuestas a una historia que ha conmovido a millones en todo el mundo.
La comunidad internacional sigue pendiente de los avances de estas investigaciones, que buscan cerrar un capítulo abierto desde hace más de una década.
