El juez Michael Jesic reduce la condena de los hermanos Menéndez, permitiendo que puedan solicitar libertad condicional tras más de 30 años en prisión por el asesinato de sus padres en 1989.

En un giro histórico que ha conmovido a la opinión pública y al sistema judicial de Estados Unidos, el juez Michael Jesic ha decidido modificar la sentencia original de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional para los hermanos Erik y Lyle Menéndez.
La nueva resolución reduce la condena a 50 años, una decisión que abre la posibilidad de que puedan solicitar su libertad condicional en el futuro cercano.
Este caso, que marcó un hito en la historia criminal del país, ocurrió en 1989 cuando los hermanos Menéndez, en aquel entonces con 21 y 18 años, asesinaron a sus padres, José y Kitty Menéndez, en su lujosa residencia de Beverly Hills, California.
La brutalidad del crimen y las circunstancias que lo rodearon generaron una gran atención mediática y un debate público sobre la justicia y la influencia de la familia en los menores.
Originalmente, ambos hermanos fueron condenados a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional, una sentencia que buscaba justicia ante un acto considerado uno de los más atroces del siglo XX en Estados Unidos.
Sin embargo, tras décadas de apelaciones y campañas en su favor, la justicia ha dado un paso importante al reconsiderar su condena.
Durante la audiencia, que se realizó vía videollamada desde la prisión en San Diego, los hermanos expresaron remordimiento y responsabilidad por sus acciones.
Lyle Menéndez, de 57 años, admitió: “Maté a mi mamá y a mi papá. No tengo excusas. Asumo toda la responsabilidad”. Por su parte, Erik, de 54 años, afirmó: “Disparé cinco veces a mis padres y fui por más munición. Mentí a la policía y a mi familia. Lo siento mucho”. Estas declaraciones representan un cambio significativo en su postura y podrían influir en futuras decisiones respecto a su posible libertad.
El apoyo familiar y de la opinión pública ha sido crucial en esta nueva etapa. Varias figuras cercanas a los hermanos pidieron al juez que considerara su cambio, argumentando que ya no representan el peligro que alguna vez tuvieron.
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El Departamento de Justicia ha solicitado a un juez federal que se encarga del caso criminal contra el ex presidente Donald Trump en Washington que intervenga después de que él publicara un mensaje en línea que parecía prometer venganza contra aquellos que lo persiganAnamaria Baralt, prima de los Menéndez, manifestó: “Creemos que 35 años son suficientes. Nuestra familia los ha perdonado y ellos merecen una segunda oportunidad”.
El caso de los Menéndez no solo resaltó los aspectos legales, sino también los dilemas morales sobre la rehabilitación y el castigo. La historia de estos hermanos, que en su momento intentaron justificar su crimen alegando presiones familiares y problemas psicológicos, ha sido objeto de múltiples análisis y documentales.
En Netflix, por ejemplo, se ha explorado su versión de los hechos, generando aún más debate sobre la justicia y la redención.
El crimen en sí fue especialmente impactante por su brutalidad y por la posición social de la familia. Los asesinatos ocurrieron en una noche en que los padres estaban en casa viendo televisión, cuando los hermanos abrieron fuego en un ataque que dejó a toda la nación en estado de shock.
Inicialmente, intentaron hacer pasar el crimen por un ataque de la mafia, pero la confesión de Erik con su terapeuta llevó a su captura y posterior condena.
Ahora, con la reducción de su condena, tanto Erik como Lyle tienen la oportunidad de solicitar la libertad condicional, lo que seguramente generará nuevas controversias y debates sobre si merecen una segunda oportunidad después de tantos años en prisión.
La decisión del juez Jesic marca un precedente en la justicia estadounidense, poniendo en evidencia la importancia de la reevaluación de las sentencias y la posibilidad de redención.
En conclusión, este caso seguirá siendo un referente en la historia criminal del país, y su resolución podría tener implicaciones más allá del ámbito judicial, tocando temas de moralidad, justicia y reparación.
La sociedad estará atenta a las próximas decisiones que tomen las autoridades respecto a los hermanos Menéndez, quienes, tras más de tres décadas, enfrentan ahora una nueva etapa en su vida, con la esperanza de alguna vez recuperar su libertad.
No te pierdas el siguiente vídeo de abogado de los hermanos menéndez habla del caso