Las fuerzas israelíes arrestaron a varios sospechosos en Gaza en medio de una operación que genera acusaciones por parte de organizaciones humanitarias y la ONU, mientras se intensifican los enfrentamientos en la región.

Imagen relacionada de conflicto en gaza detenciones y controversias en medio de la operacion militar israeli

Estas acciones ocurrieron después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) denunciara que dos de sus empleados fueron arrestados por las tropas israelíes en un edificio en la ciudad de Deir al Balah, ubicada en el centro de Gaza.

La operación, que forma parte de la primera incursión terrestre en la zona, ha generado fuertes reacciones internacionales y acusaciones por violaciones a los derechos humanos.

Supuestamente, las fuerzas israelíes afirmaron que tras realizar interrogatorios en el lugar, la mayoría de los sospechosos fueron liberados y evacuados en coordinación con organizaciones internacionales.

En su comunicado, las autoridades militares aseguraron que se actuó en conformidad con el derecho internacional, aunque no especificaron detalles sobre las acusaciones concretas contra los detenidos.

La operación se llevó a cabo en un contexto de creciente tensión en la región, donde #Gaza ha sido escenario de continuos enfrentamientos entre el ejército israelí y grupos militantes.

Por otra parte, la #OMS denunció que las tropas israelíes obligaron a mujeres y niños que se encontraban en el edificio a evacuar a pie, atravesando una zona de combate, mientras que los varones fueron sometidos a inspecciones exhaustivas, esposados, desnudados y interrogados en el lugar, algunas veces a punta de pistola.

Supuestamente, estas prácticas han sido habituales durante la ofensiva en Gaza, donde se han reportado incidentes similares en diferentes operativos militares.

Bisma Akbar, portavoz de la organización, confirmó a EFE que uno de los empleados de la OMS continúa bajo detención, aunque no precisó las razones, mientras que otros empleados y familiares fueron liberados en el acto.

La fuente oficial del ejército israelí se negó a confirmar si el empleado aún permanece en custodia y evitó dar detalles sobre las acusaciones en su contra.

El ejército justificó las inspecciones invasivas alegando que, en ocasiones, durante los interrogatorios en el terreno, es necesario que los sospechosos se despojen temporalmente de su ropa para verificar que no llevan explosivos o armas.

Pero afirmaron que las operaciones en Gaza buscan garantizar la seguridad

En respuesta a las críticas, las fuerzas armadas no abordaron directamente las denuncias de uso de pistolas durante las inspecciones, pero afirmaron que las operaciones en Gaza buscan garantizar la seguridad, especialmente en áreas donde se han reportado ataques y amenazas.

Además, una fuente de seguridad israelí aseguró que las instalaciones donde se produjeron las detenciones fueron atacadas previamente, aunque supuestamente no se reportaron víctimas en dichos ataques.

La ciudad de Deir al Balah, que no había sido objeto de incursiones militares hasta ahora, se ha convertido en un refugio para desplazados y un centro estratégico para organizaciones humanitarias que siguen operando en la zona.

La operación de #Israel en esta localidad marca un cambio en la dinámica del conflicto, que ha sido marcado por una serie de enfrentamientos y acciones militares desde que estalló la escalada de violencia en octubre de 2023.

Organizaciones internacionales como la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) han manifestado su intención de continuar trabajando en Deir al Balah, a pesar del avance de las tropas israelíes, asegurando que seguirán facilitando evacuaciones seguras para el personal humanitario.

La comunidad internacional mantiene la esperanza de una resolución que permita aliviar el sufrimiento de la población civil, aunque las tensiones en la región parecen no disminuir en el corto plazo.

Supuestamente, la situación en Gaza se ha agravado en los últimos meses, con una escalada que ha provocado el desplazamiento de miles de personas y una crisis humanitaria sin precedentes.

La comunidad internacional continúa llamando a las partes a cesar las hostilidades y a respetar los derechos humanos, mientras las negociaciones para una solución duradera parecen estar en punto muerto.