El expresidente estadounidense Donald Trump afirmó que su país no estuvo involucrado en el reciente ataque a Irán y advirtió sobre futuras acciones si Teherán toma represalias. Además, destacó la posibilidad de lograr un acuerdo entre Irán e Israel para frenar el conflicto.
A través de un mensaje publicado en su red social Truth Social, Trump afirmó categóricamente: "Estados Unidos no estuvo involucrado en el ataque a #Irán de esta noche".
Sin embargo, no dejó de advertir que, en caso de que Irán decida tomar represalias, las Fuerzas Armadas estadounidenses responderán con una fuerza y un poderío sin precedentes.
Trump también resaltó que existe la posibilidad de resolver el conflicto mediante un acuerdo entre Irán e Israel, una opción que podría poner fin a este sangriento enfrentamiento.
"Podemos llegar fácilmente a un entendimiento entre Irán e #Israel y terminar con esta violencia", afirmó, sugiriendo que la diplomacia aún es viable para evitar una escalada mayor.
Este pronunciamiento del expresidente se produce en un contexto de alta tensión en Oriente Medio, donde las relaciones entre Irán e Israel han sido particularmente conflictivas en los últimos años.
Desde la revolución iraní en 1979, Irán ha mantenido una postura de confrontación con Israel, apoyando grupos militantes y realizando ataques en la región.
Por su parte, EE.UU. ha sido tradicionalmente un aliado cercano de Israel, brindándole apoyo militar y político en diversos momentos.
El domingo también se conoció que el primer ministro israelí
El domingo también se conoció que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, afirmó que Israel actuó con el "claro apoyo" de #Estados Unidos en sus recientes operaciones contra Irán.
En un videomensaje difundido por la oficina del primer ministro, Netanyahu aseguró: "Esto es lo que Israel está haciendo con el respaldo, el claro apoyo del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y del pueblo estadounidense, así como de muchos otros en el mundo".
A nivel diplomático, la situación se complicó aún más, ya que estaba prevista una reunión en Omán entre Estados Unidos e Irán para discutir su plan nuclear, la cual fue finalmente cancelada.
La tensión en la región ha aumentado tras los ataques de este viernes entre Teherán e Israel, que han elevado la preocupación internacional sobre una posible escalada bélica.
Pese a la cancelación, Washington reiteró su compromiso con las conversaciones nucleares con Irán. Un alto funcionario de la administración estadounidense afirmó que, aunque no habrá reunión este domingo, Estados Unidos sigue dispuesto a dialogar con Teherán y espera que los iraníes se sienten pronto a negociar.
La situación sigue siendo delicada, y la comunidad internacional observa con atención cada movimiento en esta zona de alta vulnerabilidad.
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