Una niña de tres años y su perro fallecieron después de estar casi medio día encerrados en un vehículo en Maine. La madre, Kelly Brown, enfrenta cargos por homicidio en un caso que ha conmocionado a la comunidad.
La responsable principal de esta #tragedia sería supuestamente la madre de la menor, Kelly Brown, de 40 años.
Según informaciones publicadas por el medio estadounidense People, las autoridades locales encontraron el automóvil abandonado con la niña y el perro sin vida en su interior la tarde del sábado 9 de agosto.
Las investigaciones iniciales revelan que Brown habría dejado el coche a las 2 de la madrugada frente a una tienda ubicada en las afueras de la ciudad, y supuestamente regresó a las 6 de la mañana.
Sin embargo, la #policía determinó que después de ese momento, la mujer se ausentó por un período de 14 horas, sin brindar explicaciones claras.
La versión de Kelly Brown, quien actualmente enfrenta cargos por homicidio, es que en un momento mientras estaba fuera, el auto quedó abandonado por un breve lapso mientras ella recogía basura en los alrededores.
Presuntamente, en ese instante sufrió un accidente cayendo a un río cercano, motivo por el cual no pudo volver al vehículo ni salvar a su hija y a su perro.
Ella asegura que no tuvo la intención de abandonar a ambos y que la tragedia fue un accidente.
No obstante, las cámaras de seguridad en el lugar no respaldarían esa versión de los hechos. Presuntamente, las grabaciones muestran que Brown no estuvo en la zona en el período en que afirma haber tenido el accidente, lo que hace suponer que sus declaraciones podrían no ser completamente ciertas.
La policía también no encontró indicios de ninguna otra causa que pudiera haber provocado la muerte de la niña y su mascota
La policía también no encontró indicios de ninguna otra causa que pudiera haber provocado la muerte de la niña y su mascota, lo que refuerza la hipótesis de que la negligencia pudo haber sido la causa principal.
Este caso ha generado una gran conmoción en la comunidad de #Maine y ha puesto en cuestión las acciones y responsabilidades de los padres en situaciones de emergencia.
La historia recuerda a otros casos similares en los Estados Unidos, donde la negligencia parental ha tenido consecuencias fatales. Además, la tragedia llega en un momento en que las autoridades están reforzando campañas para prevenir el abandono infantil y promover la seguridad en el cuidado de menores.
Supuestamente, Kelly Brown podría enfrentar una condena que oscilaría entre las 20 y 30 años de prisión si se le dictara culpabilidad por homicidio.
La historia continúa desarrollándose y se espera que en las próximas semanas se conozcan más detalles sobre las investigaciones y el proceso judicial en torno a este lamentable suceso.
