Las autoridades palestinas han reportado al menos 10 muertes durante una operación militar israelí que ha reavivado los temores de un conflicto prolongado en la región.

En un suceso alarmante en la región de Cisjordania, al menos 10 palestinos han perdido la vida como resultado de un operativo militar llevado a cabo por las fuerzas israelíes.

Este operativo, que tuvo lugar el miércoles y que involucró el uso de helicópteros y drones, es considerado uno de los más significativos en varios meses.

Las ciudades de Jenin y Tulkarm, ubicadas en una zona conflictiva del territorio ocupado, fueron escenarios de estos enfrentamientos.

El teniente coronel Nadav Shoshani, vocero del ejército israelí, afirmó que las fuerzas israelíes habían ingresado en Jenin, un bastión militante, así como en Tulkarm y el campo de refugiados de Al-Faraa, que data de la guerra árabe-israelí de 1948. En estos enfrentamientos, se reportaron varias bajas: tres militantes fueron eliminados en un ataque aéreo en Tulkarm y otros cuatro en Al-Faraa.

Además, cinco sospechosos fueron arrestados, mientras que en Jenin se confirmaron cuatro víctimas mortales, según las autoridades palestinas.

Hamas, el grupo militante que ejerce el poder en la Franja de Gaza, ha anunciado que entre los fallecidos se encontraban 10 de sus combatientes.

La preocupación y el temor en la población palestina son palpables, ya que muchos creen que estas acciones apuntan a una ampliación del conflicto por parte de Israel, que busca desmantelar a los militantes en Cisjordania y fortalecer su control sobre la región.

La situación se complica aún más teniendo en cuenta que Israel actualmente se encuentra en conflicto con Hamas en Gaza, lo que enfatiza los múltiples desafíos de seguridad a los que se enfrenta desde el inicio de esta guerra en 2022. Esta escalada no solo pone en jaque a la población palestina, sino que también intensifica la tensión con Hezbollah, un grupo respaldado por Irán, en el sur del Líbano.

A medida que las fuerzas israelíes avanzan por las calles de Jenin, se han implementado bloqueos que restringen el acceso a hospitales, lo que ha generado una condena por parte de las autoridades sanitarias palestinas.

La comunidad palestina ha expresado su alarma ante la imposibilidad de acceder a atención médica en medio de estos enfrentamientos.

El gobernador de Jenin, Kamal Abu al-Rub, denunció a través de la radio que las fuerzas israelíes han rodeado la ciudad, impidiendo la entrada y salida de personas y destruyendo infraestructura en el campo de refugiados.

Este conflicto, que se remonta a décadas, tiene raíces profundas y complejas, siendo significativo recordar que la guerra árabe-israelí de 1948 marcó el inicio de un conflicto que ha perdurado a lo largo del tiempo, dejando una huella imborrable en la historia de la región.

Los eventos recientes en Cisjordania son un recordatorio escalofriante de que la violencia y el sufrimiento continúan para muchos, en medio de la incertidumbre política y militar.