Dos personas fueron rescatadas y una más nadó a la seguridad tras el colapso de un muelle en Santa Cruz, California, que ocurrió durante una fuerte tormenta en la costa central del estado.

En un evento desafortunado, el martes pasado (AEDT), un muelle en construcción en Santa Cruz, California, sufrió un colapso parcial que arrojó escombros al océano, lo que llevó a las autoridades a realizar un rescate de dos personas, mientras que una tercera logró nadar a la seguridad.

Este incidente ocurrió en el contexto de una intensa tormenta que azotaba la costa central del estado, causando oleajes peligrosos y condiciones adversas.

Las autoridades locales instaron a los residentes a evitar las áreas bajas cercanas a las playas, en particular alrededor del muelle de Santa Cruz, que se encuentra aproximadamente a 112 kilómetros al sur de San Francisco.

La advertencia provenía de la oficina del Servicio Nacional de Meteorología del Área de la Bahía, que a través de la red social X, enfatizó que acercarse al agua podría representar un grave riesgo para la vida de las personas.

Los rescatistas de la Cruz Roja local realizaron labores para salvar a aquellos que se encontraban en peligro en el agua, y según el departamento de bomberos de Santa Cruz, ninguno de los rescatados sufrió lesiones graves.

El alcalde de la ciudad, Fred Keeley, comentó que la sección del muelle que se vino abajo había experimentado daños a lo largo del tiempo.

En este momento, la estructura estaba cerrada y en medio de una renovacion valorada en 3,6 millones de euros, lo que implica que ya estaba en proceso de recuperación tras las tormentas del invierno anterior.

David Johnston, propietario de Venture Quest Kayaking, expresó su preocupación mientras revisaba su negocio cerca del área afectada, describiendo la situación como una 'catástrofe' para aquellos que operan al final del muelle.

Tony Elliot, director del Departamento de Parques y Recreación de Santa Cruz, informó que alrededor de 45 metros del extremo del muelle se desprendieron hacia el agua alrededor de las 12:45 PM, hora local.

La evacuación fue inmediata y el muelle permanecerá cerrado por tiempo indefinido.

El alcalde reiteró que algunos de los pilotes del muelle aún permanecen en el océano, constituyendo 'graves y serias amenazas' para las embarcaciones en la zona.

Cada uno de estos pilotes pesa cientos de kilos y está siendo arrastrado por las poderosas olas generadas por la tormenta.

Este evento resalta la fuerza incontrolable de la naturaleza y la importancia de seguir las advertencias de seguridad durante condiciones climáticas extremas, para proteger la vida y prevenir incidentes trágicos.