Arabia Saudita se ha convertido en un destino atractivo para los futbolistas de élite de todo el mundo, gracias a sus millonarios contratos.

En Medio Oriente, en el mundo de la publicidad, con tan solo tres palabras en un elegante video promocional, uno de los mayores jugadores de fútbol del mundo anunció su llegada al país que aspira a ser una superpotencia deportiva.

'Soy Hilali', dijo, mientras sonreía con orgullo vistiendo una camiseta azul brillante con gráficos que ilustraban sus habilidades deportivas.

Por 154 millones de euros al año, la estrella brasileña Neymar se ha convertido en el nuevo fichaje del club Al Hilal de Arabia Saudita.

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El video del destacado delantero brasileño Neymar el mes pasado marcó su llegada al club Al Hilal, propiedad del estado saudita, después de haber sido seducido por la liga profesional emergente del país con un contrato de 154 millones de euros al año.

No es de extrañar que esté sonriendo.

A sus 31 años, Neymar es solo la última adquisición en la creciente colección de Arabia Saudita de jugadores de fútbol de clase mundial.

Ha firmado un contrato de dos años justo a tiempo para el lanzamiento de la temporada 2023-2024 en agosto.

¿Quién será el próximo?

La continua llegada de algunos de los pies más valiosos del mundo al rico estado del Golfo no muestra signos de disminuir.

Cristiano Ronaldo celebra con su nuevo club, Al Nassr.

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Mientras el país juega a largo plazo para posicionarse como un centro cultural y deportivo internacional, los críticos han tachado esta estrategia de intento de comprar poder blando y de 'lavado deportivo' para disimular su historial de derechos humanos.

En una incursión financiada por el dinero, Arabia Saudita ha gastado este año más de 523 millones de euros solo en tarifas de traspaso, atrayendo a jugadores y entrenadores destacados de los poderosos clubes europeos.

Han fichado a jugadores como Cristiano Ronaldo, Karim Benzema, ganador del Balón de Oro, N'Golo Kanté del Chelsea y Jordan Henderson, veterano de 12 años del Liverpool.

El antiguo club de Neymar, el Paris Saint-Germain, recibió más de 100 millones de euros en el traspaso.