Dos activistas de 82 y 85 años intentaron dañar el texto original de la Carta Magna en la Biblioteca Británica en Londres antes de ser detenidos por personal de seguridad.

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En Europa específicamente en Londres, dos activistas climáticos de 82 y 85 años intentaron romper la caja reforzada que contenía un texto original de la Carta Magna en la Biblioteca Británica el viernes, antes de que el par - uno de ellos sacerdote anglicano - fueran detenidos por el equipo de seguridad.

En un video publicado por Just Stop Oil en redes sociales, la Reverenda Doctora Sue Parfitt, de 82 años, sostuvo un cincel sobre la caja mientras Judy Bruce, de 85, la golpeaba varias veces con un martillo.

Después, Parfitt sostuvo una pancarta que decía 'EL GOBIERNO ESTÁ ROMPIENDO LA LEY'.

El documento histórico no sufrió daños y el vidrio reforzado de la caja solo se astilló ligeramente, según informó la biblioteca en un comunicado.

Hay solamente cuatro textos originales de la Carta Magna, el tratado del siglo XIII que estableció que nadie estaba por encima de la ley.

Dos de ellos se encuentran en la Biblioteca Británica, uno en la Catedral de Salisbury y el otro en el Castillo de Lincoln.

'Como cristiana, me siento obligada a hacer todo lo que esté en mis manos para aliviar el sufrimiento atroz que está por venir y que ya está aquí... debemos Detener el Petróleo', se escuchó decir a Parfitt en el video.

La Policía Metropolitana de Londres informó posteriormente que habían arrestado a dos personas bajo sospecha de daño criminal relacionado con el incidente.

Gran Bretaña ha estado reprimiendo las manifestaciones disruptivas, especialmente de los activistas climáticos, que han interrumpido una serie de eventos deportivos, bloqueado el tráfico e incluso irrumpido en la residencia privada del Primer Ministro Rishi Sunak el año pasado para cubrir su casa con tela negra en protesta contra su política petrolera.

El gobierno promulgó nueva legislación en 2023 que permite una acción más contundente contra las protestas disruptivas.

Fuente: Reuters

Dos activistas de 82 y 85 años intentaron dañar el texto original de la Carta Magna en la Biblioteca Británica en Londres antes de ser detenidos por el personal de seguridad.

Como parte de una iniciativa de protesta, la Reverenda Doctora Sue Parfitt, de 82 años, y Judy Bruce, de 85 años, se vieron envueltas en un incidente en el que intentaron dañar un texto histórico de gran importancia.


A pesar de sus esfuerzos, el valioso documento no sufrió daños significativos y la caja que lo protege solo sufrió leves desperfectos.

Este acto de protesta fue captado en video y compartido en redes sociales, lo que generó una reacción mixta por parte del público.

La Carta Magna es un documento fundamental en la historia inglesa, estableciendo la premisa de que nadie está por encima de la ley.

Con solo cuatro copias originales en existencia, la protección de estos textos es de vital importancia para la preservación de la historia y la cultura del país.

La protesta de Parfitt y Bruce es solo un ejemplo de la creciente tensión entre activistas y el gobierno en temas relacionados con el cambio climático y la política energética.

La pasión y el compromiso de estos individuos reflejan un sentimiento generalizado de urgencia frente a la crisis climática que enfrenta el mundo actualmente.

A pesar de la detención de los activistas, su mensaje ha resonado en la comunidad y ha generado un debate sobre los límites de la protesta y la importancia de la acción directa en la lucha por un futuro sostenible.

La repercusión de este incidente sigue siendo objeto de discusión en varios sectores de la sociedad británica, evidenciando la división de opiniones respecto a las estrategias de activismo empleadas por algunos grupos.

En un contexto de creciente presión por parte de los sectores conservadores, es crucial que los defensores del medio ambiente y la justicia social mantengan su determinación y busquen maneras efectivas de hacer oír sus reclamos.

La acción directa, como la llevada a cabo por Parfitt y Bruce, puede ser controvertida pero también efectiva en su capacidad para llamar la atención sobre problemas urgentes y fomentar el debate público.

A medida que la sociedad avanza hacia un futuro incierto en términos de cambio climático y sostenibilidad, es probable que se intensifiquen los enfrentamientos entre activistas y autoridades.

Sin embargo, la resistencia y la persistencia de los defensores del medio ambiente son un recordatorio poderoso del poder de la protesta pacífica y la determinación de aquellos que luchan por un mundo mejor.

Fuente: Adaptado de Reuters