La Ertzaintza y las policías locales en Euskadi intensifican los controles sobre el transporte escolar del 10 al 14 de noviembre para asegurar el cumplimiento de normativas y proteger a los menores durante sus desplazamientos. Se verifican aspectos como el uso del cinturón, señalización y presencia de acompañantes, con medidas que complementan las campañas de seguridad vial del año.
La finalidad principal de esta iniciativa es reforzar la protección de los menores en sus desplazamientos hacia y desde los centros educativos, velando por el cumplimiento de la normativa vigente y previniendo posibles accidentes.
Este operativo se enmarca dentro de un calendario anual que contempla un total de 32 campañas de vigilancia y control de tráfico y transporte, realizadas de manera periódica para mejorar la #seguridad vial en la comunidad autónoma vasca.
En estas campañas, además de verificar licencias, autorizaciones y condiciones técnicas de los vehículos, se revisa específicamente el cumplimiento de medidas de seguridad esenciales para el transporte infantil.
Una de las prioridades de estas inspecciones es asegurar que el uso del cinturón de seguridad sea obligatorio y efectivo tanto para los menores como para el conductor y los adultos acompañantes.
La importancia de este aspecto radica en que, en caso de accidente, el cinturón reduciría significativamente las lesiones y salvaguardaría la vida de los niños.
Además, los controles también comprueban la señalización adecuada en los vehículos escolares y la presencia de personas adultas responsables que acompañen a los menores durante los traslados.
Las autoridades han señalado que los menores constituyen uno de los colectivos más vulnerables en materia de seguridad vial, por lo que requieren una protección especial.
Se han implementado medidas como reducir en 10 km/h la velocidad máxima permitida fuera del núcleo urbano para los vehículos de transporte escolar
Para ello, se han implementado medidas como reducir en 10 km/h la velocidad máxima permitida fuera del núcleo urbano para los vehículos de transporte escolar.
Esto garantiza un desplazamiento más seguro y reduce el riesgo de siniestros.
Por otro lado, se ha establecido que los controles se realicen preferentemente en las instalaciones de los centros escolares, una vez que los vehículos hayan llegado y el alumnado se encuentre fuera de ellos.
Esta estrategia busca minimizar la alteración a la actividad educativa y facilitar las inspecciones.
Históricamente, #Euskadi ha sido una comunidad con gran énfasis en la mejora de la seguridad vial, impulsando campañas y campañas educativas que involucran a toda la ciudadanía.
La coordinación entre diferentes cuerpos policiales ha permitido crear un entorno más seguro para los niños y adultos. La regulación del #transporte escolar ha evolucionado desde normativas básicas hasta un sistema integral que prioriza la protección de los más pequeños.
En definitiva, estas campañas de control refuerzan la responsabilidad de padres, conductores y centros educativos en garantizar que el traslado de los menores sea lo más seguro posible.
