La Ertzaintza lanzará una campaña de control de velocidad del 22 al 26 de septiembre en Euskadi, buscando disminuir la accidentalidad en las carreteras tras detectar que en 2024 el 32% de las muertes en accidentes viales estuvo relacionada con exceso de velocidad.

Esta iniciativa se realiza en el contexto de una problemática persistente en las carreteras de la comunidad autónoma, donde se evidencia que en 2024, aproximadamente el 32% de las muertes ocasionadas por #accidentes de tráfico se relacionaron directamente con la velocidad excesiva como factor principal.
La #seguridad vial sigue siendo una prioridad en Euskadi, con esfuerzos continuos por reducir los accidentes y sus consecuencias. La velocidad tiene un impacto directo en la gravedad de los siniestros: cuanto mayor es la velocidad, mayor es la probabilidad de que un accidente produzca lesiones graves o fatales.
Estudios internacionales muestran que con velocidades más altas, el tiempo y la distancia necesarios para detener un vehículo aumentan exponencialmente.
Por ejemplo, a 120 km/h, un coche puede necesitar una distancia superior a un campo de fútbol para detenerse por completo. Este factor incrementa significativamente el riesgo en tramos con trazados peligrosos o en condiciones climáticas adversas.
Históricamente, #Euskadi ha tenido un comportamiento respetuoso con los límites de velocidad, pero también ha sufrido episodios que han resultado en tragédias, muchas de ellas relacionadas con la imprudencia o la falta de control en la velocidad.
La estrategia de control intensivo es parte de un paquete mayor de medidas preventivas que incluyen campañas educativas, mejoras en la infraestructura vial y campañas de sensibilización ciudadana.
Dentro de la política de movilidad y seguridad vial
Dentro de la política de movilidad y seguridad vial, Euskadi ha implementado en los últimos años un plan que contempla la realización de 32 campañas de vigilancia y control a lo largo de todo el año, reforzando así la capacidad de respuesta ante conductas peligrosas.
La finalidad no solo es sancionar sino también educar a los conductores sobre los riesgos asociados a superar los límites establecidos.
Por otra parte, las autoridades vascas mantienen el compromiso de reducir la tasa de mortalidad en sus carreteras, inspirándose en las estadísticas internacionales que reflejan que una adecuada velocidad puede disminuir notablemente tanto el número de accidentes como la gravedad de los mismos.
Además, la conciencia ciudadana se ha incrementado en los últimos años, con campañas que resaltan la importancia de conducir a velocidades responsables, adaptadas a las condiciones del entorno.
En conclusión, las acciones que se llevarán a cabo en Euskadi del 22 al 26 de septiembre forman parte de un esfuerzo integral para salvar vidas y proteger a los usuarios de la vía.