El Gobierno Vasco presenta una nueva iniciativa que orienta recursos e inversión en innovación, alineada con las transiciones digital, energética y social, con un presupuesto superior a 630 millones de euros para potenciar la economía y el bienestar en Euskadi.
 
                                        Este plan, denominado 'Faros de Innovación', busca encauzar de manera prioritaria los recursos económicos y capital humano hacia áreas clave de investigación y desarrollo.
La iniciativa está enmarcada en la estrategia de ciencia y tecnología del Plan Corazón de #Euskadi (PCTI) 2030, y se orienta a dar respuesta a las transformaciones sociales, energéticas y digitales que marcarán el futuro cercano.
Con un presupuesto estimado de aproximadamente 630 millones de euros para los próximos ocho años (considerando un cambio de 102 millones de euros en 2030), esta estrategia pretende consolidar a Euskadi como un polo europeo de #innovación y promover un crecimiento económico sostenible.
El acto de presentación tuvo lugar en Getxo, con la participación del Lehendakari Imanol Pradales, que destacó que "estamos en un momento de decisiones importantes, en el que debemos elegir áreas estratégicas y apostar por riesgos calculados para fortalecer nuestras capacidades".
El mandatario añadió que la estrategia busca activar los recursos públicos y privados en una dirección común, con un enfoque colaborativo entre distintos departamentos y agentes del sector científico, tecnológico e industrial.
El objetivo es transformar los desafíos en oportunidades de liderazgo mediante la innovación disruptiva y la generación de conocimiento avanzado,
Desde el ámbito académico y científico, se señala que estos 'Faros de Innovación' facilitarán la creación de investigaciones de alto impacto social y económico, y guiarán el desarrollo de tecnologías transformadoras que puedan ser aplicadas a corto y medio plazo para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía.
La estrategia se estructura en torno a tres grandes transiciones: digital, energética y social, que en conjunto exigen respuestas integradas y multidisciplinares.
Llamadas Faros de Innovación
Un aspecto destacado es la apuesta por nueve áreas estratégicas, llamadas Faros de Innovación, que marcan la hoja de ruta para el futuro de Euskadi.
En la transición digital, se prioriza la inteligencia artificial, considerada un pilar para la sanidad, la eficiencia energética y la revitalización del euskera.
Además, se incluyen las Tecnologías Cuánticas, que impactan en computación, comunicaciones y ciberseguridad, y la ciberseguridad, transversal a todas las áreas y fundamental para la protección de datos y sistemas.
En la transición energética y ambiental, los focus principales son la descarbonización, mediante el impulso de energías renovables como el hidrógeno verde y tecnologías para la captura y almacenamiento de CO2; el enfoque One Health, que integra salud humana, animal y ecosistemas; y la sostenibilidad alimentaria, promoviendo sistemas de producción eficientes y con menor impacto ambiental.
Para la parte social y sanitaria, se priorizan la medicina de precisión, que permite tratamientos personalizados en áreas como oncología y enfermedades neurodegenerativas; el análisis de los factores sociales que afectan la salud —como ingresos, vivienda y apoyo social—, y las respuestas a los cambios demográficos, promoviendo un envejecimiento activo y la gestión innovadora de cuidados a largo plazo.
La gobernanza de estos proyectos estará supervisada por un grupo de trabajo dentro del Consejo Vasco de Ciencia, Tecnología e Innovación, liderado por el consejero de Ciencia, Universidades e Innovación, Juan Ignacio Péreze Iglesias.
La coordinación también incluirá recursos del Fondo de Innovación, gestionados de manera progresiva para asegurar una implementación eficiente y efectiva.
Más allá de los recursos, la estrategia busca crear un efecto tractor mediante proyectos pluridisciplinarios de gran escala que fomenten alianzas entre instituciones académicas, empresas y centros de investigación.
La meta es que en 2028 el 100% del financiamiento del Fondo de Innovación se reasigne al Departamento de Ciencia, Universidades e Innovación, garantizando continuidad y crecimiento en las iniciativas.

