Hormel Foods ha iniciado un retiro voluntario de más de 115.000 euros en carne de estofado debido a la posible presencia de trozos de madera en el producto. La medida afecta a latas de 600 gramos distribuidas en todo el país, producidas en febrero de 2025. Hasta el momento, no se han reportado lesiones ni intoxicaciones asociadas, pero las autoridades advierten a los consumidores que no ingieran el producto y lo devuelvan o desechen correctamente.

La compañía Hormel Foods, reconocida por su amplia gama de productos alimenticios, ha anunciado una importante retirada de un lote de carne de estofado debido a una posible contaminación con fragmentos de madera.
La medida, que afecta a productos con un peso de aproximadamente 600 gramos, fue comunicada por el Departamento de Agricultura y Seguridad Alimentaria de Estados Unidos (FSIS) y ha generado preocupación entre los consumidores.
El retiro voluntario afecta a unas 20.000 latas, fabricadas el 4 de febrero de 2025, con el código de lote 02045 y el número de establecimiento EST 199G. Estas latas, distribuidas en supermercados y tiendas de todo el país, llevan la fecha de consumo preferente hasta febrero de 2028. La presencia de posibles fragmentos de madera en el contenido ha llevado a la empresa a tomar medidas preventivas para garantizar la seguridad de sus clientes.
Aunque no se han reportado casos de intoxicación o lesiones, tres consumidores han manifestado haber encontrado trozos de madera en las latas. La autoridad sanitaria ha insistido en que es fundamental que quienes hayan adquirido este producto no lo consuman y procedan a devolverlo o desecharlo.
El total de unidades retiradas alcanza las 17.080 cajas, equivalentes a unos 52.000 euros en valor, considerando el precio aproximado de cada lata.
Este tipo de incidentes, aunque preocupantes, también reflejan un proceso de control más riguroso en la industria alimentaria. La tendencia de retiradas de productos contaminados ha ido en aumento en los últimos años, en parte gracias a una mayor vigilancia y a la implementación de sistemas de trazabilidad más efectivos.
En 2022, las retiradas de alimentos en Estados Unidos se incrementaron en un 15% respecto al año anterior, lo que indica que las autoridades están siendo más proactivas en la detección de posibles riesgos.
Retiran tomates en tres estados de EE.UU. por posible contaminación con salmonella
Un lote de tomates distribuidos en Georgia, Carolina del Norte y Carolina del Sur ha sido retirado del mercado debido a posibles niveles de salmonella. La medida afecta varias presentaciones del producto y busca prevenir riesgos de salud en la población. Hasta ahora, no se han reportado casos de enfermedad, pero las autoridades recomiendan eliminar los productos afectados.Hormel Foods ha declarado que mantiene un compromiso firme con la calidad y la seguridad de sus productos. La compañía ha mencionado que esta retirada se realiza “por precaución”, y que están colaborando con las autoridades para esclarecer el incidente.
Los consumidores que tengan dudas o que hayan adquirido el producto afectado pueden contactar con el servicio de atención al cliente de Hormel a través de su página web, por correo electrónico o llamando al número 00800-4635-523, disponible de lunes a viernes en horario de mañana y tarde.
Este tipo de retiradas, aunque generan alarma, también sirven para reforzar la importancia de los controles en la cadena alimentaria. La historia de las retiradas en Estados Unidos y Europa muestra que, en la mayoría de los casos, las autoridades logran detectar de manera oportuna los productos contaminados, evitando daños mayores a la salud pública.
La vigilancia constante y la cooperación entre empresas, consumidores y organismos reguladores son clave para mantener la seguridad en los alimentos que consumimos.
En Europa, por ejemplo, la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha reforzado en los últimos años sus protocolos de inspección, logrando reducir en un 20% las retiradas por contaminantes desde 2019.
La experiencia demuestra que, aunque los incidentes puedan parecer alarmantes, la transparencia y la rapidez en la acción contribuyen a minimizar riesgos y a mantener la confianza en los productos alimenticios disponibles en el mercado.