El gobierno de EE.UU. ha aprobado un programa que destinará aproximadamente 5.5 mil millones de euros para crear cuentas de ahorro para recién nacidos, incentivando el ahorro a largo plazo y potencialmente transformando el plan de educación y jubilación de millones de familias. ¿Qué implicaciones tendrá en la economía familiar y en la economía nacional?
La inversión total destinada a este proyecto es de aproximadamente 5.5 mil millones de euros, una cifra que, aunque pueda parecer elevada, representa una estrategia a largo plazo para promover la educación financiera y la acumulación de riqueza en las generaciones futuras.
Este plan, que ha sido aprobado y firmado en ley, contempla la apertura de una cuenta de #ahorro para cada bebé nacido entre 2025 y 2028. La aportación inicial será de unos 5,500 euros por cada recién nacido, y se espera que esta cantidad se incremente con contribuciones adicionales de los padres, familiares, empleadores, y en algunos casos, de instituciones públicas y privadas.
La idea es que estas cuentas sirvan como un fondo de inversión para el futuro, orientado principalmente a la educación, la compra de una vivienda o incluso el ahorro para la jubilación.
El concepto es similar al de una cuenta IRA (Individual Retirement Account) pero dirigido a los niños desde su nacimiento. Lo que hace presuntamente único a este programa es que las cuentas comenzarán con un saldo inicial de unos 5,500 euros, que se espera crezca con el tiempo gracias a las contribuciones y a la inversión en fondos indexados de bajo costo, que reflejan el comportamiento del índice S&P 500.
Supuestamente, Dell Technologies, una de las mayores empresas tecnológicas, ha anunciado que aportará más de 5 mil millones de euros –equivalentes a 4,2 mil millones de euros– a este fondo, con el objetivo de aumentar el valor de aproximadamente 25 millones de cuentas.
Este movimiento ha sido visto como un ejemplo del compromiso del sector empresarial con la iniciativa, y otros líderes del mundo de los negocios han sido invitados a seguir su ejemplo.
¿Cómo funcionan estas cuentas? Según análisis de varias instituciones, como Morningstar y la Fundación de Impuestos, el gobierno promete crear una cuenta para cualquier bebé con solo tener un número de seguro social.
La contribución máxima anual será de aproximadamente 4.400 euros, con aportaciones adicionales permitidas por parte de empleadores, gobiernos locales y organizaciones benéficas. Sin embargo, no se podrán realizar aportaciones hasta julio de 2026.
El dinero en estas cuentas estará invertido en fondos indexados de bajo costo, y las ganancias no serán gravadas mientras permanezcan en la cuenta.
Los beneficiarios podrán retirar fondos a partir de los 18 años, sin penalizaciones, para fines como la educación superior, la compra de la primera vivienda o incluso para el retiro.
Después de los 59 años y medio, las retiradas por motivos distintos a la jubilación también serían libres de impuestos.
Algunos expertos consideran que esta iniciativa podría ser un paso decisivo hacia la educación financiera y la reducción de desigualdades económicas a largo plazo
El programa, que se estima costará unos 14.5 mil millones de euros hasta 2034, ha generado opiniones divididas. Algunos expertos consideran que esta iniciativa podría ser un paso decisivo hacia la educación financiera y la reducción de desigualdades económicas a largo plazo, mientras otros lo ven como una estrategia política que busca dejar una huella duradera en la sociedad, incluso si ello implica un aumento en la deuda pública.
Históricamente, Estados Unidos ha promovido diversos programas de incentivos para el ahorro, desde las cuentas 529 para la educación hasta los planes de jubilación, pero este nuevo fondo para niños desde su nacimiento podría marcar un cambio en la política social y económica del país.
La gran pregunta que surge ahora es si las #familias aprovecharán estas cuentas en mayor medida que otros instrumentos tradicionales, como los planes 529 o las cuentas de inversión privadas.
En conclusión, este movimiento del gobierno, presuntamente respaldado por importantes figuras del sector empresarial, busca incentivar una cultura de ahorro desde la infancia, promoviendo la inversión a largo plazo y la planificación financiera.
