El Club Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires realiza jornada de concienciación y curso de Reanimación Cardiopulmonar (RCP) para preparar a sus socios ante emergencias cardiacas.
La importancia de saber realizar RCP no puede ser subestimada.
Según la American Heart Association, hacer este tipo de maniobras de manera inmediata puede duplicar o incluso triplicar las posibilidades de supervivencia de una persona que sufre un paro cardíaco.
Cada minuto que pasa sin intervención reduce significativamente las probabilidades de recuperación, por lo que la rapidez y la eficacia en la respuesta son esenciales.
El Club Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires realizó una jornada para concienciar y dictó un curso de Reanimación Cardiopulmonar (RCP), una iniciativa impulsada por la jefa de prensa de la institución, Mercedes Fuentes.
Esta propuesta surgió a raíz de una experiencia personal y contó con el apoyo de Rosario Della Cella, cardióloga de la clínica San Camilo, y Federico Calacau, traumatólogo, para planificarla.
La idea fue por mi papá, que en el 2022 tuvo un infarto en el club.
Yo estaba cubriendo un partido y él estaba con mi mamá. Entonces, para concientizar a los socios, ideé esto que me parece súper importante para que todo el mundo pueda estar y saber lo que tiene que hacer en un caso así, señaló Mercedes Fuentes.
El objetivo de la iniciativa es otorgar visibilidad a la práctica de RCP y capacitar a los socios del club para que puedan asistir a una persona en caso de un episodio similar, brindando ayuda crucial hasta la llegada del servicio médico.
El proyecto ha sido recibido con entusiasmo por los miembros del club, quienes reconocen la importancia de prepararse para enfrentar emergencias de este tipo.
Para nosotros es importante transmitir este tipo de prevenciones o medidas preventivas para salvar una vida.
Cosas que no pensamos que pueden suceder, suceden y hay que estar preparados, le dijo Víctor Lamberti, presidente de GEBA, a Clarín.
La iniciativa del club me parece espectacular.
Concientizar a los socios es clave porque tus manos pueden salvar vidas y a veces uno no se da cuenta de lo simple e importante que es, agregó José Chatruc.
Además, esta iniciativa del club contó con la participación de Thomas Habif y Santiago Tarazona, jugadores de los Leones, la Selección Argentina masculina de hockey sobre césped, y José Chatruc, exfutbolista y reconocido comentarista deportivo.
Los pasos que aprendimos son, primero, conocer la situación en la que está la persona: si está inconsciente y si respira o no.
Segundo, llamar a un médico o dar la orden para que alguien llame a un médico y comenzar con las maniobras de RCP, esperando que llegue el profesional con el DEA, explicaron los jugadores de los Leones.
En los últimos años se han podido detectar cada vez más incidentes de este tipo, jugadores de fútbol que se desploman en los campos de juego o simpatizantes en las tribunas.
Esto se debe a la intensidad con la que se llevan a cabo las disciplinas deportivas o la falta de chequeos médicos necesarios que nos permiten saber si estamos aptos físicamente.
Capacitar a más personas en RCP es un paso crucial hacia la creación de comunidades más seguras y resilientes.
En situaciones de emergencia, cada segundo cuenta, y contar con personas preparadas para actuar puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
En euros, la inversión en desfibriladores externos automáticos (DEA) puede oscilar entre los 700 y 2000 euros, dependiendo de la marca y modelo.
Esto significa que un club como GEBA, con múltiples sedes y gran cantidad de socios, podría haber destinado entre 4900 y 14000 euros en la adquisición de estos equipos para garantizar la seguridad de sus miembros.
A lo largo de la historia, la realización de maniobras de RCP ha sido fundamental para salvar vidas en situaciones de emergencia.
En el año 1960, el doctor Peter Safar desarrolló la técnica de reanimación cardiopulmonar moderna, que ha evolucionado y salvado incontables vidas desde entonces.
La capacitación en RCP es una herramienta invaluable en la lucha contra las muertes súbitas, y su difusión en instituciones como clubes deportivos es un paso importante hacia la creación de comunidades más seguras y preparadas ante emergencias cardíacas.